La Oral Deportiva
·6 de octubre de 2024
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·6 de octubre de 2024
El triunfo clásico de Nacional 2-1 sobre Peñarol tiene un mérito mayúsculo y no solo porque deja al tricolor como líder del Clausura junto a Danubio y lo pone a dos unidades del aurinegro en la Anual, sino porque le ganó a su tradicional rival y hasta a su propia gente, que hizo todo lo posible para que no sacara el triunfo que mereció largamente por haber sido superior a lo largo de los 90 minutos.
Es difícil de entender las imbecilidades que hicieron algunos hinchas y que conspiraron contra sus propios intereses. Empezando por Mateo Antoni, que luego del 1-0 marcado por Sebastián Coates provocó a los rivales y se fue expulsado desde el banco. Y siguiendo por algunos hinchas ubicados en la Abdón Porte, que después del 2-1 anotado por Federico Santander tiraron (en momentos distintos) dos bombas que explotaron cerca de futbolistas locales, porque primero cayó aturdido Gabriel Báez y luego Lucas Sanabria.
Más allá de estos hechos que generaron primero una revuelta y luego la amenaza del árbitro Leodán González de suspender el partido (hubiera estado bien si lo hacía y seguro hubiera ocurrido si uno de los que caía era uno de Peñarol), estos hechos llevaron a cortar el impulso de Nacional, porque pasaron largos minutos que le permitieron al aurinegro recomponerse del golpe sufrido.
Entonces, el mérito de Nacional es grandísimo, porque le ganó futbolísticamente a Peñarol y anímicamente a todas las dificultades que su autoinfligió.
Desde lo deportivo, la principal diferencia que hubo fue la postura de cada uno. Mientras el tricolor salió a jugar el clásico, el mirasol salió a pelearlo. Cuando se decidió a soltarse encontró al menos generar peligro, algo que no hizo durante los primeros 45 minutos. El gol de Gastón Ramírez para el 1-1 fue totalmente fuera de contexto, porque fue en la primera ocasión que hubo una jugada inquietante para Luis Mejía, quien había tenido un clásico muy tranquilo.
Si Peñarol se mantuvo en partido hasta el gol de Santander en el minuto 84 fue por su arquero, Washington Aguerre, que fue la figura del equipo con varias tapadas muy buenas. Podrán gustar o no sus actitudes, ese es otro tema, pero está claro que está hecho a medida para ocupar un arco tan pesado como el de un grande.
La justicia de la victoria de Nacional está fuera de discusión, porque fue superior (incluso más de lo que refleja el marcador) durante los 90 minutos, incluso cuando el rival intentó la reacción. La clave fue el medio, donde Martín Lasarte diseñó un sistema que los jugadores aplicaron muy bien, sobre todo con un Christian Oliva exuberante: aislar a Leonardo Fernández. De esa manera dejó sin generación a un Peñarol inoperante, impreciso.
Al clásico por supuesto que no le faltaron las polémicas y hubo dos que se le deben achacar al árbitro Leodán González, pero sobre todo al VAR liderado por Christian Ferreyra:
En ninguno de los dos casos desde el VAR se llamó al árbitro para ver las acciones. Si lo que se hizo con lo ocurrido por Méndez fue para compensar la no expulsión de Báez no es un error enmendado, sino dos errores.
Disputadas seis fechas y con 8 todavía por jugarse el Uruguayo está abierto. Danubio y Nacional lideran el Clausura, Peñarol está tres puntos atrás y dos adelante del tricolor en la Anual, así que la definición pinta para ser emocionante.
Día: 6/10/24Hora: 16.00Estadio: Gran Parque CentralTV: VTV Plus y Disney+Árbitro: Leodán GonzálezAsistentes: Agustín Berisso y Marcelo AlonsoCuarto árbitro: Leandro LassoVAR: Christian Ferreyra, Diego Dunajec y Nicolás TaránGoles: 22′ S. Coates (N), 46′ G. Ramírez (P) y 84′ F. Santander (N)
Clasificación ofrecida por Sofascore
Clasificación ofrecida por Sofascore
Nunca un clásico es un partido más, pero en este caso está en juego buena parte de la temporada. Nacional recibe a Peñarol este domingo a la hora 16.00 en el Gran Parque Central por la fecha 6 del Torneo Clausura y si hay un ganador accederá al primer lugar del certamen y dependiendo de cuál de los dos lo haga marcará la Tabla Anual.
Los tricolores llegan con los mismos 11 puntos que los aurinegros, a tres de distancia de Danubio luego que La Franja dejara dos puntos el sábado al empatar 1-1 con Defensor Sporting en su clásico. Sin embargo, donde parece estar más centrada la atención es en la tabla acumulada del año, porque allí hay 5 puntos de distancia en favor de Peñarol, por lo cual de ganar Nacional se pondrá a solo 2 y de hacerlo el mirasol se alejará a 8. Ahora bien, ¿quién se juega más en este partido? Aunque suene extraño ese es Peñarol. ¿Cómo puede ser si es el que va arriba en la Anual? Aquí el argumento:
El conjunto orientado por Diego Aguirre ya tiene asegurada la presencia en la definición del Uruguayo por haber ganado (y en forma invicta) el Apertura. Eso obliga a Nacional a ganar el Clausura o la Anual. La cuestión es que el tricolor tendrá tiempo para al menos aspirar a ganar el torneo corto y estará enfocado únicamente en eso. Peñarol, en cambio, tiene como gran objetivo inmediato la Copa Libertadores, por la cual debe jugar los partidos semifinales ante Botafogo (23 y 30 de octubre) y eso lo hará arriesgar en el torneo local con un equipo alternativo que, por ejemplo, ya cedió dos unidades al igualar 0-0 con Racing. Nacional lo aprovechó para cerrar la brecha en ambas clasificaciones.
Por el lado de Nacional la novedad es que Martín Lasarte vuelve a contar con Mauricio Pereyra luego del desgarro, aunque no será titular. También tendrá a la orden al juvenil Exequiel Mereles, recuperado de un esguince de tobillo sufrido en el último choque.
En Peñarol Gastón Ramírez se mete al once en lugar del sentido Jaime Báez, pasando Eduardo Darias a ocupar el extremo izquierdo.
El clásico del Apertura finalizó con empate 0-0 en el Campeón del Siglo, donde no hubo hinchada visitante como tampoco lo habrá en esta ocasión. Por el Intermedio los dos grandes del fútbol uruguayo se enfrentaron en la final, fue empate 1-1 (goles de Leonardo Fernández para el mirasol y Gonzalo Petit para el tricolor) y Nacional se quedó con el título en la tanda de penales.