Nations League: Dos versiones de España en el inicio | OneFootball

Un contraste entre control absoluto y capacidad de adaptación en el campo del combinado español

La Selección Española muestra dos caras en su inicio en la UEFA Nations League: un control absoluto del balón que no se traduce en goles ante Serbia y una brillante victoria contra Suiza, superando la adversidad con un hombre menos. ¿Está España cerca de encontrar el equilibrio entre posesión y contundencia?

El equipo de Luis de la Fuente arranca la UEFA Nations League mostrando sus fortalezas en la posesión, pero también evidenciando la necesidad de mejorar su contundencia en el área rival. Tras un empate sin goles frente a Serbia y una victoria arrolladora ante Suiza, España busca consolidar un estilo equilibrado y efectivo.

Serbia 0-0 España: Dominio sin profundidad

El debut de España en la competición frente a Serbia dejó sensaciones encontradas. Aunque los números favorecieron a La Roja con un 70% de posesión y más de 20 disparos, el resultado fue un empate a cero. España controló el balón y dominó el ritmo del partido, pero una vez más se encontró con un problema recurrente: la falta de efectividad en los metros finales.

El equipo de De la Fuente, compuesto en su mayoría por los campeones de la Eurocopa, se mostró cómodo en el control del balón, con largas posesiones y jugadas trabajadas. Sin embargo, la defensa serbia se cerró bien y frustró los intentos de ataque, sobre todo las incursiones por banda de Nico Williams y Lamine Yamal.

Fuente: https://rfef.es/es/noticias/cronica-serbia-espana-uefa-nations-league Seleccion Española de Futbol

Este empate subraya uno de los mayores retos de España: la capacidad de desbordar defensas compactas. A pesar del talento ofensivo y la calidad en la creación de juego, faltó esa chispa final para convertir el dominio en goles. No es que España esté en crisis, pero sí es evidente que necesita mejorar en partidos donde las defensas rivales se encierran.

Suiza 1-4 España: Resiliencia y capacidad para sufrir

Tres días después, la roja cambió la narrativa con una victoria abrumadora 1-4 sobre Suiza. Lo más impresionante no fue solo el resultado, sino cómo se logró: jugando con un hombre menos desde el minuto 19, tras la expulsión de Robin Le Normand.

El equipo de De la Fuente mostró carácter desde el principio. Joselu, con una asistencia de Lamine Yamal, abrió el marcador a los tres minutos y, poco después, Fabián Ruiz puso el segundo. Aunque Suiza acortó distancias, España mantuvo la compostura y, a pesar de estar en inferioridad numérica, gestionó el partido con inteligencia. Los goles finales de Fabián Ruiz y Ferran Torres sellaron una victoria brillante.

Este partido destacó la capacidad del combinado español para superar la adversidad. Con un David Raya excepcional en la portería y una defensa ordenada, el equipo demostró que no solo sabe dominar, sino también sufrir y ser letal en los contragolpes.

Fuente: https://rfef.es/es/noticias/cronica-suiza-espana-uefa-nations-league Selección española de futbol

Estos dos primeros partidos reflejan bien las dos caras de España. Por un lado, el equipo domina el balón, pero necesita mejorar la definición en el área rival. Por otro, como mostró ante Suiza, es capaz de resistir en escenarios adversos y aprovechar al máximo las oportunidades cuando se presentan, incluso con un hombre menos.

Desde mi punto de vista, el verdadero reto para Luis de la Fuente no es mantener la posesión o la solidez defensiva, aspectos ya bien trabajados. El reto está en convertir ese dominio en una mayor incisividad en ataque. Ante selecciones de élite, la paciencia en el control del balón puede resultar frustrante si no se traduce en goles. El empate ante Serbia es un claro ejemplo de esto.

La victoria ante Suiza, aunque fue positiva, expuso la necesidad de encontrar un equilibrio. La expulsión temprana obligó a España a adaptarse a un estilo más reactivo, y curiosamente, el equipo brilló en ese rol. Quizás esto sirva de lección: en ocasiones, ceder el control para aprovechar los errores rivales puede ser más efectivo que monopolizar el balón. Si España logra ese equilibrio entre control y pegada, estará en el camino correcto hacia la consolidación.