OPINIÓN | Los cimientos | OneFootball

Se sabe que Luis Fernando Tena gana cuarenta y cinco mil dólares mensuales, mientras sus colaboradores cobran entre diez y veinte mil, según el puesto que desempeñan.

Si comparamos esas cantidades con las que se manejan en el primer mundo, es obvio que el mexicano devenga una miseria, porque en su propio país le podrían pagar mucho más; eso sí, si en el vecino del norte alguien se acordara que él existe y lo llevara a un club profesional.

Pero para nosotros es demasiado dinero, y la forma de dilapidar los recursos nos recuerda las épocas de Bilardo/Luján, Brindisi, el Bolillo Gómez y otros tantos estafadores que se llevaron un montón de dinero y no dejaron nada.

Por eso me vuelvo a preguntar, ya que se dispone de una fortuna para invertir, ¿Por qué no se contrata a buscadores y formadores de talentos? ¿Por qué no se construyen canchas, se equipan gimnasios, se adquiere tecnología para el seguimiento de los patojos, no solo en su aprendizaje y evolución futbolística, sino también en los aspectos médicos, nutricionales y sicológicos?

Si ir a un Mundial Mayor es el piso más alto del edificio, primero tenemos que dotarlo de buenos cimientos para que no se nos caiga cada cuatro años.