Parce, Wílmar Roldán expulsó a Edwin Cardona en la banca | OneFootball

Parce, qué locura lo que pasó con Edwin Cardona esta tarde… ¡Y eso que ni siquiera estaba jugando! El man estaba sentadito en el banco, parchado, viendo el partido, cuando de repente se calentó por una falta fuerte que le metieron a un compañero. Como buen líder, no se quedó callado. Pero ahí fue cuando todo se desató…

Wílmar Roldán, el juez del partido, no se la dejó montar. El árbitro paisa, bien conocido por ser de mano dura, no aguantó el reclamo de Cardona y ¡pum! Roja directa desde el banco. Así como lo leés, parcero. Una expulsión de esas que uno dice: “¿En serio, hermano? ¿No era pa’ tanto?”

Cardona, con la sangre caliente, se paró del banco y le habló duro a Roldán, defendiendo a su parcero en la cancha. Pero Roldán estaba más estricto que profe en parcial y no le tembló la mano pa’ sacarle la tarjeta. Y es que eso fue lo que más sorprendió, que ni siquiera estaba jugando…

Ahora el panorama no pinta fácil para el crack. Se habla de que podría caerle hasta con dos fechas de sanción, parce. Sí, dos partidos por una roja desde la banca. ¡Una locura! Pero así es el reglamento, y con Roldán no hay margen pa’ salirse del libreto.

Lo que uno se pregunta es si no hay un poco de exageración en esa decisión, porque una cosa es poner orden, y otra es apagar la pasión con la que se vive el fútbol. Todos sabemos que Cardona tiene ese fuego competitivo, esa chispa de barrio que no lo deja quedarse callado cuando ve una injusticia.

Y sí, fue fuerte el reclamo, no vamos a tapar el sol con un dedo, pero también hay que entender que el fútbol es de emociones, de momentos calientes, y más cuando es por defender a un compañero. En esas, Edwin siempre ha sido de los que dan la cara, así esté afuera del campo.

Lo cierto es que la roja ya está, y ahora toca esperar el veredicto oficial, pero el debate ya está en la calle, en los grupos de WhatsApp, en la tribuna digital. ¿Fue justa la expulsión? ¿O se le fue la mano al árbitro? ¡Opiniones hay pa’ tirar pa’ arriba!

De lo que sí estamos seguros, parceros, es que Cardona es puro corazón, y aunque esta vez se fue pasado de revoluciones, eso también habla de su compromiso. A veces el fútbol se gana con garra, con voz, con berraquera… y eso, al menos, nunca le falta al hombre.