La Oral Deportiva
·27 de julio de 2024
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No soy afecto a explicar el resultado de un partido por una mala decisión arbitral porque entiendo que a lo largo de 90 minutos más descuentos (y eventualmente hasta alargues) suceden muchas más alternativas que hacen que en definitiva la responsabilidad de lo sucedido recaiga en mayor cantidad de fallos de futbolistas que de un mal pitazo, pero en este caso siento la necesidad de que sí debe encontrarse en el juez Mathías De Armas la razón del triunfo de Peñarol por 1-0 sobre Defensor Sporting que le dio a los aurinegros el pasaje por primera vez a la final del Torneo Intermedio.
Antes de analizar el encuentro del Campeón del Siglo hay que hablar del otro resultado que tenía incidencia en la definición. Wanderers venció 1-0 a Deportivo Maldonado y durante 12 minutos (entre el 79 y el 90+1, cuando llegó el tanto aurinegro) fue el finalista, pero no le alcanzó. Nada para reprocharse el bohemio, porque hizo lo que debía, pero también fue víctima del escándalo arbitral en el CDS.
Dicho esto, pasemos a lo ocurrido entre mirasoles y violetas y sobre todo a la jugada clave, que ocurrió al minuto 10. Anderson Duarte recibió en el área aurinegra, quedó de espaldas al arco, giró, remató y anotó, pero en su giro abrió su brazo izquierdo que impactó contra el pecho de Javier Méndez. El defensa aurinegro se tomó la cara en una clara exageración y cayó fulminado. El árbitro Mathías De Armas convalidó el gol, pero Daniel Rodríguez lo llamó desde el VAR y lo hizo venir al monitor. Allí le pasaron las imágenes y el principal decidió anular el gol. Un escándalo por donde se lo mire.
Primero, porque el contacto del brazo del delantero con el pecho del defensa es mínimo, sin incidir en la estabilidad del futbolista, porque no tuvo la intensidad como para desestabilizar al rival. Segundo, porque desde el ángulo de una cámara que apuntaba hacia el arco de Peñarol se vio claramente (y lo observó De Armas) que Méndez cae acusando un golpe en el rostro que no existió, lo cual valida una simulación o, en todo caso, una exageración. Sí, sa decisión de De Armas de anular un gol absolutamente lícito terminó dejando afuera de la final a Defensor Sporting. Punto y aparte.
Después vino todo lo demás: claro dominio violeta durante el primer tiempo basado en su imposición en la mitad del terreno, su profundidad de ataque y su velocidad en transición; también sus fallas a la hora de definir, especialmente en un contraataque en el cual quedó cuatro contra dos y no cerró bien la jugada.
A partir del ingreso de Lucas Hernández para el inicio del complemento Peñarol pasó a controlar el ritmo y a tener la iniciativa, porque desde el extremo izquierdo le dio más profundidad al ataque, el movimiento táctico de Diego Aguirre mandó a jugar a Maximiliano Silvera al centro del ataque (que hasta entonces había ocupado Facundo Batista) y además Leonardo Fernández jugó más liberado, pasó a tener contacto con el balón más cerca del arco rival y a incidir en el juego, tanto con los balones parados como en movimiento, porque sacó un par de remates muy peligrosos.
En la segunda mitad Peñarol mereció anotar ante una pálida expresión de Defensor respecto a lo que había hecho en los primeros 45 minutos. Entonces llegó el otro momento clave del partido: la decisión polémica pero acertada de Diego Aguirre. El técnico mandó al campo a Matheus Babi por Maximiliano Silvera seguramente con la orden de que mandaran envíos aéreos al área para ver si el brasileño podía hacer gala de su capacidad cabeceadora.
A esa altura (86’) ya se sabía en el CDS que Wanderers ganaba con gol de Nicolás Royón por lo cual era impostergable el gol, pues el 0-0 ya no alcanzaba. La gente se indignó con la inclusión del brasileño, al que durante las últimas semanas se situó afuera del aurinegro, pues se le estaba buscando un nuevo destino. Y el criticado centrodelantero se puso la capa de héroe, recibió de pecho un envío profundo y definió ante el achique de Kevin Dawson para marcar el gol del triunfo en el primer minuto de descuentos. Sí, el deporte es maravilloso porque le da posibilidad al villano de transformarse en héroe y Babi es prueba viviente de ello. Apenas hizo su segundo gol en el aurinegro, pero valió para dejar una marca histórica en una institución señera como Peñarol, al que clasificó por primera vez a una final del Intermedio, la que seguramente disputará con Nacional en un nuevo clásico decisivo para el fútbol uruguayo.
Futbolistas, cuerpo técnico, dirigentes e hinchas de Peñarol nada tienen que ver con lo ocurrido y por lo tanto tienen derecho a festejar. Eso no quita que su llegada a la final del Intermedio esté manchada por una escandalosa decisión arbitral que, más que beneficiar al aurinegro, perjudicó a Defensor y Wanderers en partes iguales.
Estadio: Campeón del SigloHora: 17.30TV: VTV Plus y Disney+Árbitro: Mathías De ArmasAsistentes: Martín Soppi y Mathías MunizCuarto árbitro: Pablo GiménezVAR: Daniel Rodríguez y Horacio FerreiroGol: 90’+1 M. Babi (P)
Cambios: 46′ L. Hernández x F. Batista, 73′ S. Cristóforo x Gastón Ramírez, 80′ F. González x J. Cabrera y 86′ M. Babi x M. Silvera.
Cambios: 6′ F. Barrios x A. Cambón, 69′ A. Barco x J. Valiente, 80′ R. Cabrera x J. Álvarez y W. Montoya x A. Soria.
Clasificación ofrecida por Sofascore
Clasificación ofrecida por Sofascore
Sin Eduardo Darias por lesión y con la ilusión de incorporar a Brian Rodríguez, Peñarol recibe este sábado a las 17.30 a Defensor Sporting en un partido con tinte de final, pues ambos llegan a la última fecha del Torneo Intermedio igualados como líderes, por lo cual de haber un vencedor ganará el Grupo A y con ello el pasaje a la final.
El aurinegro recupera para este encuentro a su principal figura, Leonardo Fernández, ausente por sanción el fin de semana pasado en la victoria 2-0 sobre Fénix, aunque su retorno no será el único cambio. Maximiliano Olivera regresa al lateral zurdo y Lucas Hernández subiría unos metros en el campo para ocupar el jugar de Darias. Facundo Barboza, autor de un gol en la última presentación, deja su lugar a Fernández, por lo cual Diego Aguirre varía también el sistema de juego al pasar del 4-4-2 a un 4-2-3-1
El violeta perdió a una de sus figuras, Fernando Elizari, quien se marchó al América Mineiro, pero ya tiene pronto para debutar al argentino Walter Montoya, recientemente incorporado para reemplazarlo. Álvaro “Chino” Navarro, técnico de Defensor, todavía cuenta con Nicolás “Ojito” Rodríguez pese a que Nacional lo pretende.
A la misma hora se enfrentan Wanderers y Deportivo Maldonado, partido que puede tener incidencia en la definición porque si empatan Peñarol y Defensor y gana el bohemio, éste clasificará a la final como ganador del grupo.
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