La Oral Deportiva
·8 de mayo de 2023
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·8 de mayo de 2023
Seguramente no fue voluntario, sino que quien elaboró el póster para redes sociales en Peñarol a fin de celebrar la obtención del Torneo Apertura tomó la lista de los futbolistas que integran el plantel, se basó en ella y añadió al técnico Alfredo Arias. Sin embargo, ese descuido llevó a un grosero error: omitir la presencia de quien fue la figura clave para la obtención del título.
¿Pablo Bengoechea? No. ¿El presidente Ignacio Ruglio? Tampoco. ¿De quién estamos hablando entonces? Del futbolista que en las primeras 9 fechas dejó a Peñarol encaminado al título: Ignacio Laquintana.
Como se ve en la imagen, aparecen todos los integrantes actuales de Peñarol en el póster de reconocimiento, incluidos los dos arqueros juveniles que no tuvieron ni un minuto en el certamen, pero falta el futbolista que fue la figura del clásico la misma tarde de domingo que le comunicó a sus compañeros que se iba a jugar al Bragantino, en el cual por cierto hoy no está jugando por haber sufrido una grave lesión.
Es cierto que el elenco aurinegro perdió su único partido de la campaña con él en cancha. Fue en la octava jornada, justo antes del clásico, por 1-0 ante Liverpool y en Belvedere, pero la importancia que tuvo Laquintana fue tal que a partir de su salida el entrenador modificó varias veces el sistema de juego para tratar de suplirlo y no pudo hacerlo. El equipo decayó en su juego y aunque en las cuatro fechas posteriores ganó 10 de los 12 puntos que disputó, le ganó con lo justo a tres equipos que están en la parte baja de la tabla: Danubio, Plaza Colonia y Fénix.
Una muestra de lo influyente que fue Laquintana para la ofensiva mirasol fue que Matías Arezo, el máximo anotador del equipo, lleva convertidos 8 goles (aún restan los partidos con Racing y Wanderers) y todos los hizo mientras lo tuvo como socio en ataque. Aunque su punto débil era la definición, el veloz puntero rompía defensas, atraía marcadores, llegaba hasta el fondo, mandaba centros o provocaba faltas y tarjetas en las cercanías del área rival, todo de lo cual sacó provecho el artillero de Peñarol.
Se fue Laquintana y se notó su ausencia, porque al haber desdeñado el entrenador Arias de los punteros desde su salida Arezo no volvió a anotar por el Apertura ni por la Copa Sudamericana. Peñarol es campeón, pero no olvida a Laquintana. Bueno, al menos en el juego, porque en el póster…