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·8 de agosto de 2023
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·8 de agosto de 2023
Con el inicio de la nueva temporada de La Liga a solo 4 días de distancia, el RCD Mallorca se prepara con entusiasmo para enfrentarse a Las Palmas. A pesar de que el conjunto bermellón ha experimentado un buen mercado de fichajes hasta el momento, aún aguarda con ansias la llegada de algunas incorporaciones clave. No obstante, la temporada también presenta un desafío importante para el Mallorca, ya que deberá enfrentar la partida de dos figuras trascendentales de la campaña pasada: Galarreta y Kang In Lee.
Con la satisfacción de una temporada pasada brillante, en la que quedaron a tan solo 3 puntos de los codiciados puestos europeos, el Mallorca encara con ilusión y determinación la nueva campaña. Agradecidos al cuerpo técnico liderado por Javier Aguirre, la plantilla espera superar sus logros previos con cautela pero ambiciones elevadas. El sueño de competir en Europa se anida en el corazón bermellón, impulsando a cada jugador a dar lo mejor de sí en cada encuentro.
Los fichajes de Lato y Mascarell han fortalecido y enriquecido la profundidad del equipo, agregando nuevas armas al ya formidable arsenal. Pero es la llegada estelar de Cyle Larin, proveniente del Valladolid y el segundo fichaje más costoso en la historia del Mallorca por 7,5 millones, lo que ha encendido la llama de esperanza en la afición mallorquinista. La perspectiva de una dupla letal en la punta de ataque con Muriqi y Larin se vuelve un motivo de entusiasmo, forjando una delantera llamativa y potente que bien podría estar entre las mejores de la liga.
Sin embargo, para alcanzar las metas europeas, el Mallorca sabe que aún debe fortalecer su equipo con más refuerzos. La partida de figuras trascendentales como Kang In Lee y Galarreta, quienes fueron pilares fundamentales la pasada temporada, representa un desafío que la nueva sangre y la posible llegada de Sergi Darder buscan subsanar. El Mallorca se arma con determinación y confianza para enfrentar los retos que se avecinan, y la ilusión se funde con la certeza de que este equipo va con todo en busca de una nueva y gloriosa temporada.
El RCD Mallorca ha dado pasos certeros en el mercado de fichajes, reforzando su plantilla con astutas adquisiciones. Los fichajes de Omar Mascarell por 500 mil euros, Lato a coste cero y la llegada estelar de Cyle Larin por 7,5 millones de euros han generado gran expectación entre la afición bermellona. Estos jugadores prometen aportar talento y calidad para fortalecer aún más el conjunto.
Sin embargo, la ilusión no se detiene ahí, ya que el Mallorca aspira a incorporar a Sergi Darder, una pieza que parece vital para el equipo. Aunque la cláusula de rescisión del jugador es de 15 millones de euros, una cifra inaccesible para la mayoría de clubes en España, el Mallorca no se rinde y busca alcanzar un acuerdo con el RCD Espanyol para asegurar la llegada del futbolista de Artà. La posible adquisición de Darder agregaría un elemento adicional de creatividad y visión al centro del campo, lo que impulsaría aún más las posibilidades de éxito del equipo en la nueva temporada.
Con el respaldo de estos movimientos en el mercado de fichajes, el Mallorca se prepara para encarar con convicción y ambición el próximo desafío liguero.
El RCD Mallorca ha experimentado un proceso de reestructuración en su plantilla, con notables salidas que han dejado un sabor agridulce entre los seguidores. Dos partidas especialmente dolorosas han sido las de Kang In Lee, traspasado al PSG por 22 millones de euros, de los cuales el Mallorca se queda con 17 millones, y la de Galarreta, quien partió gratis tras concluir su contrato sin renovación. Estas bajas significativas impactan en la conformación del equipo.
A estas se suman otras salidas hasta el momento, como la de Jordi Mboula y Ángel, quienes han quedado en libertad para buscar nuevos destinos. También, Leo Roman fue cedido al Oviedo, mientras que Kadewere, Augustinson, Hadzikadunic y Nastasic culminaron sus cesiones o contratos abandonando el club. Además, el Mallorca parece estar buscando salidas para Clement Grenier y Antonio Sánchez, quienes han sido comunicados de que no entran en los planes de Javier Aguirre.
El proyecto de futuro del Mallorca se cimenta en la base de un equipo fortalecido con fichajes estratégicos. Omar Mascarell y Lato, adquiridos con inteligencia y tino, amplían el fondo de armario y aportan solidez al conjunto. La llegada estrella de Cyle Larin, por 7,5 millones de euros, ha generado una expectativa desbordante en la afición, que sueña con una dupla ofensiva imparable junto a Muriqi. La delantera mallorquinista promete ser una de las más atractivas y temibles de la liga, llenando de emoción y esperanza cada partido que se avecina.
Sin embargo, el proyecto también enfrenta la dura realidad de las salidas. La partida de Kang In Lee, traspasado al PSG por 22 millones de euros, de los cuales el Mallorca recibe 17 millones, y la despedida de Galarreta al término de su contrato, han dejado un vacío en el equipo. Además, otras salidas como las de Jordi Mboula, Ángel, Leo Roman, Kadewere, Augustinson, Hadzikadunic y Nastasic, sumadas a la posible salida de Grenier y Antonio Sánchez, generan la necesidad de reestructurar y encontrar un equilibrio en el plantel.
El Mallorca afronta este nuevo ciclo con la mirada puesta en el objetivo de competir por las anheladas plazas europeas. La conjunción de experiencia, talento y juventud es la fórmula que el equipo busca para forjar un proyecto sólido y exitoso. Con la unión de la afición como bandera, el club se prepara para enfrentar con valentía y pasión cada encuentro, demostrando que el trabajo en equipo y el espíritu de lucha pueden superar cualquier obstáculo.
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