Real Madrid busca revancha en su visita al Kairat Almaty | OneFootball

Unos 6.500 kilómetros separan al Santiago Bernabéu de Almaty, pero el Real Madrid viajó hasta Kazajistán para disputar la segunda jornada de Champions League. El rival será el Kairat Almaty, en un partido programado para las 18:45 horas. Tras la dura derrota 5-2 frente al Atlético de Madrid en el Metropolitano, el equipo de Xabi Alonso busca recuperar confianza.

El viaje no ha sido sencillo, pues el desfase horario obliga a jugar en condiciones poco habituales. Mientras en España el partido arranca a las 18:45, en Almaty serán las 21:45. El pitazo final superará la medianoche, un factor que también puede influir en la intensidad del encuentro.

Sin embargo, lo prioritario para el Real Madrid es sumar tres puntos que mantengan el buen inicio en la Champions tras vencer 2-1 al Marsella. Xabi Alonso planea mantener la base del once, aunque las bajas por lesión de Carvajal, Trent, Mendy, Rüdiger y Militao limitan sus opciones defensivas. Courtois estará en portería, acompañado por Carreras, Huijsen, Alaba y la duda entre Asencio o Valverde en el lateral derecho.

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El desafío del Real Madrid ante el Kairat Almaty en Champions League

En el mediocampo, Tchouaméni será clave junto a Bellingham y Güler, ambos con necesidad de reivindicarse tras un discreto derbi. En ataque, Mastantuono, Vinicius y Mbappé serán los encargados de liderar la ofensiva, con el francés consolidado como figura intocable pese a las críticas al inicio de temporada.

Por su parte, el Kairat Almaty es visto como un equipo desconocido en esta edición de la Champions, pero su clasificación refleja un proceso exitoso. Bajo el mando de Rafael Urazbakhtin, cuenta con una base de futbolistas kazajos reforzados con jugadores de experiencia internacional. Jorginho, con ocho goles en la temporada iniciada en marzo, es su figura más peligrosa, mientras que los israelíes Arad y Glazer aportan solidez al once.

De este modo, la ciudad de Almaty se prepara para vivir un encuentro histórico en el Estadio Central. La Champions, nacida con el Real Madrid como gran referente, abre un nuevo capítulo en territorios lejanos. La visita blanca no solo significa fútbol, también simboliza la expansión global de una competición que sigue creciendo.