Roony Bardghji se gana el corazón de la afición | OneFootball

Casi dos meses después de unirse al Barcelona, ​​Roony Bardghji hizo su debut oficial con el primer equipo el domingo en el Estadi Johan Cruyff.

Con Lamine Yamal lesionado y Raphinha aparentemente sancionado por llegar tarde a una reunión informativa previa al partido , Bardghji fue colocado directamente en la alineación titular contra el Valencia.

Bardghji se ha ganado rápidamente el apoyo del vestuario azulgrana

Ahora bien, según SPORT, desde el primer día, Roony Bardghji impresionó a todos en el vestuario del Barcelona con su humildad.

El extremo de 19 años llegó con cierta incertidumbre, ya que no estaba del todo claro si se incorporaría al primer equipo o al filial, pero pronto se hizo evidente que tenía potencial para pasar toda la temporada a las órdenes de Flick.

El sueco causó una gran impresión en los entrenamientos y marcó en su primer partido de pretemporada. Futbolista habilidoso e imaginativo, se ha comprometido a pulir detalles junto con el cuerpo técnico para acelerar lo que está demostrando ser una adaptación sorprendentemente fluida.

Fuera del campo, Bardghji también ha dejado huella. Es accesible, educado y se integra con naturalidad en el vestuario. Su inglés fluido facilita la comunicación con Flick, el cuerpo técnico y varios compañeros.

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Fuera del fútbol, ​​ha entablado amistad con jugadores como Jules Kounde y Marcus Rashford, pasando tiempo con ellos cuando sus horarios se lo permiten.

Ganándose a los fans

Otro rasgo que distingue a Bardghji es su trato con la afición. A las afueras de la Ciudad Deportiva , suele detenerse para mostrar su gratitud, firmar autógrafos, posar para fotos y, sobre todo, charlar con los aficionados que esperan cada día.

Es algo poco común en la plantilla y muy valorado por quienes siguen de cerca al equipo. La semana pasada fue el ejemplo perfecto: Armand, fiel aficionado del Sant Joan Despí , le regaló una foto enmarcada de la pretemporada.

Ese día, Bardghji salió por la puerta trasera para evitar las multitudes, y aunque decenas de fanáticos corrieron hacia su auto, no pudo detenerse a agradecerle a Armand.

Al día siguiente, sin embargo, vio a Armand entre la multitud, algo difícil dada la cantidad de asistentes, y detuvo su coche para hablar con él personalmente. Le dio las gracias y admitió: «Me gustó tanto que lo he guardado en un estante de casa».

En poco tiempo, Bardghji ya se ha ganado el respeto de sus compañeros de equipo y del departamento deportivo y también se está ganando los corazones de los fanáticos.