Offsider
·23 de noviembre de 2024
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·23 de noviembre de 2024
«Vivo el ahora, estamos pasando un buen momento, los chicos están trabajando con mucha responsabilidad. Estoy tranquilo, en paz, estoy en un lugar que… quiero mucho al lugar donde estoy y nada, chao». Con tono emocionado y casi llorando.
”Que podía ser gol. Justo mantuvimos anoche una charla larga e intensa con él sobre el lugar que tiene en el equipo y la importancia que nosotros le damos a cada uno que juega. Cada uno es muy importante para nosotros. Y llegó ese desmarque, el pase de De Paul, en un partido que se había puesto raro en el primer tiempo. El Alavés se encerró muy bien, trató de cerrarse con orden y mucho trabajo. Nos fuimos al descanso y creo que el equipo siguió mejorando el paso, teniendo más agresividad, intención, más peso en el área, y eso nos provocó tener más peligro. Apareció el penalti y una jugada hermosa, finalizada de la mejor manera por Sorloth».
“No creo que cada uno no se levante sin querer seguir creciendo, nosotros estamos en esa búsqueda también”.
“Yo siempre digo lo mismo. Cuando hablo de defensa parece que tenemos que nombrar al lateral, centrales, el portero… Pero el equipo trabaja muy bien en bloque, ha ganado más fortaleza. Depende del trabajo colectivo, pero tenemos que seguir buscando mejorar”.
“Me centro en lo que puede pasar en los 90 minutos. Me los imagino los partidos como un juego de cartas, las necesito porque sin ellas no puedo jugar y tener la posibilidad de gestionar cierto tipo de situaciones. Es verdad que ellos están más contentos o no, cada uno de los que está en la plantilla sabe su realidad, y cuál es, quince, diez, siete, ser importantes”.
“La Copa del Rey, después de 14 años sin ganarle al Madrid. Rompimos una situación que se hacía dura para nuestros aficionados y creo que eso fue un poco un quiebre que nos dio esa visión de decir: ‘Cuidado, que se puede”.
“Muchas cosas. Ningún partido lo imaginé así. Soy un afortunado absoluto en todo, cuerpo técnico, solo Pablo (Vercellone) sigue desde el inicio. Estoy agradecido a los futbolistas que me han ayudado a recorrer todo este camino, que me permitieron transmitir dentro del campo una idea de vivir la vida y este juego. Ni que hablar de Miguel Ángel y Enrique, por sostenerme en momentos de dificultad, que los ha habido. Gracias a nuestra gente, desde que llegué como jugador, sentimos un grandísimo respeto y eso no tiene precio. Y a mi familia, les he quitado minutos, muchos, y les agradezco”.
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