Sory Kaba abandona Las Palmas y vuela a Bélgica | OneFootball

La UD Las Palmas ha puesto punto y final a la etapa de Sory Kaba en la isla tras anunciar la rescisión de su contrato, al que todavía le restaban dos años de vigencia. El delantero guineano, que había quedado sin ficha profesional en el cierre del mercado, se encontraba en una situación límite que hacía inviable su continuidad.

La entidad amarilla y el futbolista han llegado a un acuerdo que permite a la UD ahorrarse parte de su ficha. Aunque todavía deberá afrontar el pago de los tres primeros meses de la actual temporada. Con esta decisión, se cierra un capítulo marcado por la falta de protagonismo. Y por el desencuentro entre jugador y dirección deportiva.

Un regreso al hogar

Una vez liberado de su contrato, Kaba ha optado por volver a un entorno conocido. Y ha decidido regresar al OH Leuven de la Primera División belga. El delantero ya defendió los colores del club flamenco en la campaña 2021-22. Estuvo cedido por el Midtjylland danés, donde dejó buenas sensaciones en un campeonato que conoce bien. Su regreso se produce en calidad de agente libre. Y responde al deseo del propio jugador de tener libertad de decisión en su futuro. Para el Leuven supone recuperar a un delantero de envergadura que conoce la liga. Y que, pese a sus últimas temporadas discretas, todavía mantiene un buen cartel en Bélgica.

El paso de Kaba por la UD Las Palmas se tradujo en números muy alejados de lo esperado. En la temporada 2023-24 disputó 20 encuentros oficiales. 17 de ellos en Liga y 3 en Copa del Rey, en los que únicamente logró anotar dos goles y repartir una asistencia. Con un rol secundario en los planes de García Pimienta, el club optó por cederlo al Elche el curso pasado. Tampoco logró despegar. Participó en 24 partidos en Segunda División y firmó cuatro tantos.

Foto: LaLiga

Sory Kaba, un negocio nefasto

Fueron cerca de dos millones lo que pagó el conjunto amarillo por él. Se puede considerar una de las operaciones más deficitarias del club en los últimos tiempos. Pese a llegar como uno de los fichajes estrella de aquel mercado, el delantero nunca llegó a consolidarse ni como titular ni como alternativa fiable.

Y su salida por la puerta de atrás deja en evidencia el fracaso de la apuesta. La rápida depreciación de su valor de mercado, unida a la necesidad de darle la carta de libertad, sitúan su fichaje entre los peores negocios del club en las últimas décadas.