Vermouth Deportivo
·9 de diciembre de 2025
Tecnología en el deporte: la revolución silenciosa que va mucho más allá del VAR

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·9 de diciembre de 2025

Los eventos deportivos son una de las fuentes de entretenimiento más importantes en Latinoamérica, en donde las tribunas se llenan de apasionados que vitorean a sus equipos favoritos. Esta pasión ha permanecido intacta durante décadas, sin embargo, la adopción de nuevas tecnologías está mostrando una nueva cara de los eventos deportivos.
En el fútbol esto puede verse con claridad. La aparición del VAR, por ejemplo, ha marcado un antes y un después en la determinación de los resultados. Hoy en día, la emoción por un gol ya no se canta tan rápido, hay distancias milimétricas que pueden anular un gol de un segundo al otro. La celebración queda en suspenso hasta que los jueces determinen, tecnología mediante, el veredicto.
La tecnología en el deporte ha alterado la experiencia y las formas de consumo de los eventos. La expansión de las plataformas de apuestas deportivas modifica la condición de los hinchas que no apuestan por el favorito, sino por el equipo que tiene mayores chances de ganar. Podés visitar páginas de apuestas deportivas en Argentina comparadas por Estafa.info, un sitio confiable que analiza la oferta del mercado actual.
Pero el VAR y las casas de apuestas son tan solo una pequeña parte, y tal vez la más visible, de la gran infraestructura tecnológica que hoy se emplea en el mercado del deporte y sus formas de hacerse visible. Detrás del espectáculo hay equipos especializados en sofisticadas tecnologías que analizan los escenarios y optimizan el rendimiento de los jugadores.
Según un artículo de Forbes, la industria deportiva se encuentra cada vez más interesada en la incorporación de tecnologías como la inteligencia artificial. La multinacional Globant ha dado a conocer un informe llamado MOVE YOUR BUT en el que se destaca que el mercado de la IA aplicada al deporte podría llegar a alcanzar los 19.200 millones de dólares en 2030.
Pero, ¿en qué se traduce dicha incorporación? Puede que los especialistas sepan, pero esta información no está naturalmente al alcance de los aficionados. La realidad es que se trata de sistemas de tecnología que hoy resultan clave para identificar necesidades de jugadores, implementar entrenamientos y planificar estrategias de juego.
La inteligencia artificial es una herramienta que contribuye a la interpretación de los partidos. Permite procesar una enorme cantidad de datos en tiempo real. Pases, carreras, movimientos y goles se analizan para proveer información que puede ser sumamente rica a la hora de planificar el juego.
Los patrones que pueden escapársele al ojo humano de cualquier entrenador o equipo técnico son rescatados por la IA. Así, se diseñan estrategias sumamente específicas para las diferentes instancias de los partidos: estructuras de ocupación del espacio en la cancha, rutas de pases con mayor probabilidad de éxito para el gol, detección de momentos para presionar o defender, y mucho más.
Los avances en materia de tecnología también han permitido hilar fino para mejorar los rendimientos de los deportistas de manera personalizada. Por ejemplo, hay artefactos, como los sensores de vibración que detectan alteraciones musculares pequeñas que pueden devenir en desgarros o lesiones más graves si no se las trata a tiempo.
El retiro de un jugador por una lesión puede durar años y cambiar el curso de los resultados de un partido de un momento a otro. Predecir lesiones graves puede salvar jugadores, clubes y hasta aumentar las probabilidades de triunfo en una temporada. De cara a la apertura de un nuevo año y con el calendario completo del Mundial 2026 en mano, los equipos técnicos se aseguran de contar con las mejores tecnologías.
Como mencionábamos anteriormente, la IA es un recurso clave para almacenar y cruzar datos que permiten el diseño de estrategias eficaces, pero también es fundamental para confeccionar planes individuales de rendimiento para cada jugador. Teniendo en cuenta sus características, el historial de lesiones, su estilo en particular y hasta su estado emocional o nivel de estrés que esté manejando al momento.
El papel de los aficionados también está viéndose afectado por las nuevas tecnologías. Los modelos de consumo han cambiado, ya no solo quienes acuden a los estadios pueden disfrutar de los eventos deportivas, ahora las casas de apuestas son una opción popular. Pero el boom de este sector sembró una crisis dado que, cuando hay dinero de por medio, los hinchas se ven en el conflicto de tener que apostar con la cabeza y no con el corazón.
Asimismo, las apuestas se están expandiendo a los eSports que plantean un nuevo modelo de consumo masivo de deportes electrónicos, distinto al del deporte tradicional. En este sector, la tecnología está mayormente puesta al servicio de generar ecosistemas envolventes que sumerjan al jugador en la experiencia.
En las apuestas deportivas, los aficionados pueden participar apostando en los diferentes mercados que ofrecen las disciplinas. Las apuestas en vivo, por ejemplo, ofrecen gráficos estadísticos que facilitan la elaboración de pronósticos más precisos. Así, los aficionados dejan de ser meros espectadores y pasan a tener un rol activo, mientras la tecnología y el ecosistema digital transforman su relación con el deporte.









































