Triunfazo de Talleres, ante Vélez en Liniers, para conseguir alivio en la tabla anual | OneFootball

Talleres derrotó a Vélez Sarsfield 1-0, en el estadio José Amalfitani, por decimocuarta fecha de la Zona B del Torneo Clausura. Con esta victoria, el equipo cordobés dio un paso enorme para su permanencia en la Liga Profesional, dejando debajo a seis equipos en la tabla anual, y además por ahora está entrando a los play offs de este Clausura.

Un simple razonamiento explica este merecido triunfo de Talleres: si un equipo patea muchas veces al arco rival va a tener muchas más chances de anotar que el equipo que casi nunca dispara al arco contrario. Y eso pasó. El equipo de Carlos Tévez dispuso de menor posesión pero remató, sobre todo de larga y media distancia; Vélez gozó de mayor control y ambiciones pero casi nunca disparó.

Con un medio campo batallador y poblado, con Ulises Ortegoza como estratega, y la rapidez de Luis Tevez apostó por un planteo con mucha gente en el mediocampo y dos delanteros rápidos como el colombiano Luis Angulo y el brasileño Rick atentos al contragolpe para inquietar arriba.

Con este esquema Talleres estuvo cerca de la apertura con varios remates de afuera que salieron cerca: dos de Rick, uno de Angulo, un par de Ortegoza (uno de ellos atajado por Tomás Marchiori). Y además, una solitaria y rapidísima corrida de Angulo que se iba al mano a mano con el arquero fue interceptado justo por Agustín Bouzat.

El equipo de Guillermo Barros Schelotto presionaba alto, manejaba la pelota, le daba brillo cuando pasaba por Manuel Lanzini, pero no tenía ideas claras en los metros finales. Tampoco probaba de afuera, como repetía Talleres. Y la única situación en el primer tiempo fue un disparo cruzado de Maher Carrizo que salió desviado por el segundo palo.

Lo que no pudo de afuera, Talleres lo encontró adentro. Mateo Cáceres tocó para Juan Portilla y siguió su camino vertical adentro del área, llegó la devolución filtrada y perfecta para dejar a Cáceres frente a Marchiori y vencerlo con un derechazo casi desde el punto penal, a los 3 minutos del segundo tiempo.

Con este gol, Talleres se replegó y Vélez incrementó su empuje hacia adelante. Se jugó en una zona delimitada: los últimos tres cuartos de cancha hacia donde atacaba el local. Sin embargo la carencia para ser claro y los remates francos continuaron siendo el déficit de El Fortín.

Salvo un remate del ingresado Florián Monzón que tapó Guido Herrera y un cabezazo de Thiago Silvero, otro que entró, que reventó el travesaño, Vélez no generó oportunidades claras. Le sobraron ganas, le faltó precisión y luminosidad.

Y en tiempo de descuento, con Vélez más desesperado y apremiado, en un aislado contragolpe Talleres estuvo cerca del segundo golpe, con una escapada de Joaquín Mosqueira que quedó mano a mano con Marchiori, que tuvo una espectacular reacción desviando con su extendida pierna izquierda el remate.

Mientras la T celebró esta importante victoria, El Fortín dejó escurrir las pocas chances que le quedaban de llegar a la próxima Copa Sudamericana por la tabla anual.