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·8 de noviembre de 2024
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La Federación Francesa y Deschamps no tienen miramientos para aplicar un ‘cordón sanitario’ a sus estrellas. Le pasó a Benzema y estuvo cinco años vetado.
La Federación Francesa y el propio Didier Deschamps no se andan con miramientos cuando pesa sobre alguno de sus internacionales una causa judicial, o tienen sospechas de que podría haberla. Aunque es una situación radicalmente distinta a la actual de Mbappé, de nuevo fuera de una lista por decisión de Deschamps, el mejor ejemplo de ‘cordón sanitario’ a una estrella de Les Bleus lo mostraron con Benzema. Cuando saltó el escándalo en 2016 por la por entonces supuesta implicación del exmadridista en la trama que estaba chantajeando a su compañero de selección, Mathieu Valbuena, con un vídeo íntimo de índole sexual que amenazaban con hacer público.
Un terremoto con muchas etapas judiciales pero la primera consecuencia fue la exclusiónsine die de Benzema de su selección. La purga duró casi seis años, hasta mayo de 2021, cuando Karim pudo reintegrarse justo para disputar la Eurocopa por decisión de Deschamps, que decidió revertir esa enquistada situación. Ese veto de un lustro de duración dejó a Benzema sin jugar la Eurocopa de 2016 (Francia fue finalista) y sobre todo, el Mundial de 2018 en el que selección del gallo tocó el cielo. En esa escalada no estuvo el delantero, que para entonces estaba en una guerra frontal con su federación y con Deschamps.
La ausencia de Benzema se convirtió en un debate casi de Estado en los vecinos al norte de los Pirineos. Benzema acusó directamente a Deschamps de “plegarse ante los racistas” en Francia como detonante para su ausencia de la Eurocopa 2016 y otro internacional francés, Samir Nasri, le secundó al año siguiente, casi a puertas del Mundial. “¿Racismo? Está claro, yo también lo he vivido, Ben Arfa también, hizo una gran temporada con el Niza y aún así no fue a la Eurocopa. No todo es el valor deportivo, importan los orígenes…”. Mientras, una encuesta en L’Èquipe mostró que el 55% de la afición francesa no quería de nuevo a Karim con la camiseta nacional. El escándalo había saltado, también, a la arena política y a la de una sociedad con tensiones raciales.
El choque con Deschamps contó con el bidón de gasolina del entonces presidente de la Federación Francesa, Noel Le Graët (que por cierto abandonó el puesto en 2023 por un escándalo de acoso sexual). Según el propio agente de Benzema, Karim Djaziri, en 2019 el máximo dirigente del fútbol galo boicoteó una reunión entre el futbolista y Deschamps para acercar posturas. El ir y venir de mensajes públicos entre Le Graët y Benzema siguió en los siguientes años, con tantarantán del presidente al delantero en las celebraciones por el Mundial de Rusia. “Señor Le Graët, por favor, le pido que me olvide y me deje en paz”, respondió el último en sus redes sociales.
Así hasta mayo de 2021, cuando se cocinó el regreso de Benzema con Francia… aunque aún no había resolución judicial sobre el caso Valbuena. Esta llegó pasada aquella Eurocopa. En noviembre de 2021 el Tribunal de Versalles condenó al atacante a un año de prisión condicional y una multa de 80.000€ a Valbuena. Benzema agotó el tiempo para una posible apelación y prefirió no prolongar la causa y admitir la condena. Aunque con peros. “Mi cliente consideró que una nueva audiencia no cambiaría nada y que no se le juzgaría como debería”, aseveró en la prensa francesa su abogado, Hugues Vigier.
El cierre del círculo de Benzema con la selección gala se produjo en el Mundial de Qatar. Fue convocado y era su oportunidad de resarcirse de la anterior cita mundialista, pero tuvo que regresar de la concentración por una lesión muscular. Desde el 13 de junio de 2022 no ha vuelto a disputar un partido representando a Francia.
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