Verstappen roza la épica y Norris, el Mundial; Alonso, catorce | OneFootball

Interlagos.– Pon un Interlagos en tu vida. Nadie sabe qué tiene este templo de la Fórmula 1 que siempre brinda carreras apetitosas y suculentas. En otras palabras, siempre pasan cosas. Además, caprichos de la vida, Brasil tiene tradición de decidir campeonatos y 2025 no fue una excepción. La remontada de Max Verstappen el año pasado en este escenario, bajo la lluvia y saliendo desde la P17, fue legendaria. Este año rozó una gesta parecida partiendo desde el pit lane pero Lando Norris fue un poco más rápido. El británico separó al neerlandés de unos puntos claves por el Mundial y lo alejó de la victoria. Su Red Bull dio caza a Antonelli, segundo, hasta la última curva pero no pudo celebrar nada más que el podio. Se quedó a cuatro décimas. Oscar Piastri, el otro contendiente, terminó quinto.

La salida fue un auténtico caos digno de Interlagos. Complicado saber dónde mirar con tantos frentes abiertos. El ídolo local Gabriel Bortoleto rompió los corazones de los miles de aficionados brasileños de la grada cuando vieron que su carrera duró media vuelta. Lance Stroll le cerró la puerta en la zona lenta, estranguló al Sauber y le hizo tocar la hierba. Ahí perdió el control inmediatamente y se fue contra las protecciones. El coche de seguridad hizo acto de presencia y benefició a Lewis Hamilton, que había tenido un contacto en la salida con Carlos Sainz.

El británico cayó a la última posición tras ser golpeado pero, para más inri, volvió a sufrir un toque unas curvas más tarde. Su Ferrari tocó la trasera izquierda de Franco Colapinto y rompió alerón delantero, teniendo que entrar en boxes. Se reincorporó al pelotón después de la parada pero nunca encontró el ritmo. Hamilton, de hecho, pidió volver a parar enseguida para montar medios. En la relanzada, más caos y polémica. Piastri trató de hacer la heroica adelantando en la frenada de la uno por el interior a Antonelli y Leclerc pero se pasó de frenada y terminó llevándose puestos a ambos.

El australiano fue castigado con diez segundos de sanción por su exceso de optimismo y por arruinar la carrera de Leclerc, que tuvo que retirarse. Su McLaren golpeó al Mercedes de George Russell pero, el efecto dominó, afectó también al monegasco, que siempre tiene mala suerte. Esta vez fue la suspensión. Salió el coche de seguridad virtual y Verstappen aprovechó para hacer la primera parada y ahorrarse tiempo. Entre todo el caos, Sainz era décimo y Alonso, undécimo.

Mientras, Verstappen iniciaba su remontada adelantando a todo el mundo. El campeón fue toda la carrera con el cuchillo entre los dientes, consciente de que necesitaba los puntos y de que los McLaren estaban en cabeza, con un ritmo de carrera infernal. Algo se debió notar el nuevo motor montado que le obligó a salir desde el pit lane. Apenas duró en los últimos puestos porque adelantó con facilidad y, al finalizar Norris su primera parada, salió justo detrás del neerlandés. Con blandos veinte vueltas más jóvenes, el británico tardó poco en recuperar la posición.

Red Bull lo intentó todo

La carrera entró en un valle, con un ritmo más bajo y con Verstappen continuando su remontada. El piloto de Red Bull decidió volver a parar, temprano, tras ser adelantado por el líder del Mundial para tratar de buscar algo diferente. Partió con duro, como los Aston Martin, precisamente para eso: ver si sonaba la flauta. Remaba y remaba en medio de la parrilla mientras Hamilton se retiró en la vuelta 38, por el ecuador de la prueba. Desastre de Ferrari con sus dos coches sin terminar la carrera. Verstappen se puso líder cuando Norris realizó su segunda parada, en la vuelta 51, con un colchón de siete segundos con el McLaren y con veinte vueltas por delante.

No se puede decir que Red Bull no lo intentó, pues montó un blando nuevo a Verstappen para tratar de buscar une remontada épica en las últimas vueltas. Venía mucho más rápido que Norris, Antonelli y Russell pero solo tenía catorce vueltas por delante. Pudo con Russell pero no con Antonelli ni Norris, que roza ya el título de la temporada 2025. Alonso y Sainz no disfrutaron durante la carrera. En la primera relanzada, el asturiano fue superado por los Williams, se quejó por radio sobre cambios en la configuración pues no encontraban la adecuada: «Cambia algo más». Y al final lanzó un «¿estamos corriendo contra alguien?» para mostrar su enfado. Terminó decimocuarto dando caza a Esteban Ocon y Alex Albon, lejos de los puntos. Carlos Sainz terminó decimotercero en una jornada agria para los españoles.