Diario UF
·5 de enero de 2021
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Dyche es un entrenador muy defensivo, y siempre ha mantenido a su conjunto con un fútbol básico y sólido. Plena confianza en Tarkowski y Mee, claves en el sistema defensivo. Dyche basa su sistema en defender con un bloque muy bajo, no tener la posesión y atacar mediante juego aéreo y balones permanentemente en largo. Para su táctica, Dyche usa el tradicional 4-4-2.
El artillero anglo-austriaco nacido en Bath es una de las leyendas modernas del club. Lleva en el club desde 2014 tras llegar procedente del Brighton. El delantero, que en la actual temporada lleva un gol en doce partidos jugados en Premier League, y en toda su carrera en Turf Moor lleva 44 goles y 8 asistencias en 211 partidos.
Es el delantero estrella del conjunto de Dyche y es justo lo que su entrenador quiere. Un «tanque» que baja balones, pianos, planetas o lo que le echen. Remata y pelea todo, y que se compenetra a la perfección con su compañero Wood y con el eterno suplente, Vydra.
El neozelandés, ex del Leeds, WBA y Leicester, entre otros, cumplió el sueño de llegar a la Premier tras incluso sufrir acoso en la escuela por no jugar a rugby. Tras llegar al Burnley en 2017, este año lleva tres goles, pero en tres años y medio ha marcado 41 goles y asistido 6 veces en 125 partidos.
De estas cifras vive el club cada año. Es «Mr. Burnley», ya que se adapta perfectamente a lo que le pide el entrenador y pelea como el que más, además de que gracias a su gran poderío del juego aéreo se consiguen segundas jugadas que son útiles.
En un equipo como el Burnley, que vive especialmente de su portero, sus dos centrales y sus dos delanteros, estos son muy importantes. Un club que defiende tan atrás tiene que aprovechar cualquier oportunidad que tenga para marcar gol. Además, tal y como juegan los clarets, son dos delanteros perfectos para su estilo.
Con garra, que peleen todo, y que también tengan gol. Al elenco de Dyche no le interesa tener la pelota. No la quiere, no la utiliza. No le compensa tener a un jugador del estilo de Dani Ceballos o Mason Mount. Dejaron escapar libre a Hendrick, y apañaron la medular con Brownhill y Westwood, con Cork entrando en rotación en esa zona.
Su fútbol es básico, y, de momento, les sirve. No se andan con florituras ni fichajes de jugadores con marketing o que valgan millonadas. Bastan los que están, y ellos les sostienen.