Análisis post Chelsea FC 3 – 0 FC Barcelona | El Barça vuelve a caer en Europa | OneFootball

El Barça se mostró incapaz de hacer frente al Chelsea en lo que supuso su segunda derrota en Champions League

El cuadro blaugrana voló hasta Londres para enfrentarse a los de Maresca en Stamford Bridge, un estadio que trae muy buenos recuerdos a los culés pero que hoy se convirtió en una pesadilla para el Barcelona. El choque estuvo muy igualado durante la primera mitad, incluso después del 1-0, pero la roja de Araujo condenó al Barça a tener que convivir en inferioridad numérica durante la segunda mitad con un equipo tan complicado como el Chelsea que acabó dominando por completo el encuentro que se cerró con un 3-0.

Se enfrentaron dos rivales con un estilo de juego muy similar, líneas defensivas altas, centro del campo muy dinámico y bandas muy potentes. La posesión estuvo muy repartida, ligeramente favorable al Chelsea, lo que dañó al Barça, que está sufriendo mucho cuando no controla el esférico esta temporada. La potencia física y la intensidad del Chelsea fueron determinantes en su victoria, y se hicieron aún más patentes con la expulsión de Araujo por doble amarilla en una acción innecesaria del uruguayo.

En igualdad numérica ningún equipo estaba despuntando de manera notable, el primer gol del Chelsea no supuso un mazazo sobre los blaugranas que supieron reaccionar acertadamente. Sin embargo, el quedarse con diez sobre el céspedal filo del descanso sentenció al Barça para la segunda parte, que se encontró muchas acciones de 3 vs 2 (especialmente a la contra) que no supieron solucionar y que eventualmente se convirtieron en los goles que sellaron la derrota del Barça.

El Chelsea demostró una intensidad que los de Flick no supieron igualar. Las transiciones de los ‘Blues’ mataron al Barcelona, que se mostró totalmente impotente a la hora de contener los arreones del equipo inglés. La presión orquestada por Maresca hizo mella en los culés, que perdieron demasiados balones que desencadenaron en ataques de los británicos liderados por Estevão, quien fue un dolor de muelas durante todo el encuentro para la defensa azulgrana y que además terminó anotando.

En definitiva, el Barça vuelve a demostrar que tiene enormes carencias defensivas. Más allá de la roja, no supo interpretar ni manejar las acciones ofensivas del Chelsea, que hizo y deshizo a su antojo durante todo el partido. Los culés deben medir más la presión, tener mayor contundencia en campo propio y mejorar el juego con balón, que fue muy errático en este partido. Muchas pérdidas, pases sencillos fallados y falta de ideas redujeron al máximo las posibilidades del Barcelona de hacer un gol.