Da igual la pelota
·6 octobre 2025
Del rugido en casa al susurro fuera: el Atlético y su gran asignatura pendiente

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·6 octobre 2025
El Atlético de Madrid está viviendo una temporada de claroscuros. En casa, el equipo de Simeone ha recuperado su versión más dominante, capaz de arrollar a rivales como el Real Madrid (5-2) o el Eintracht de Frankfurt (5-1). Sin embargo, fuera del Metropolitano, su rendimiento cae en picado. Los rojiblancos encadenan cuatro partidos sin ganar como visitantes, un dato preocupante para un club con aspiraciones de título
La visita al Celta volvió a dejar en evidencia las debilidades del Atlético fuera de casa. El conjunto madrileño se adelantó con un gol en propia puerta de Starfelt tras una transición conducida por Barrios, pero el encuentro cambió drásticamente con la expulsión de Clément Lenglet antes del descanso. La inferioridad numérica obligó a los rojiblancos a resistir durante más de 50 minutos, hasta que un gol de Iago Aspas selló el empate definitivo.
El guion se repite. Igual que ocurrió en Mallorca con la roja a Sorloth, en Vigo el Atlético vio cómo su plan se desmoronaba al quedarse con diez. Lenglet fue protagonista negativo tras recibir dos amarillas por acciones innecesarias sobre Jutglà, dejando a su equipo en desventaja demasiado pronto. Situaciones que reflejan una falta de control en momentos clave.
Tras el encuentro, Jan Oblak fue contundente en sus declaraciones: “Fuera de casa nos cuesta muchísimo y es difícil de explicar”. El portero rojiblanco lamentó haber dejado escapar “dos puntos importantes” y subrayó que, si el Atlético quiere competir por el título, debe mejorar urgentemente sus resultados a domicilio. También incidió en la necesidad de “creer más” y “gestionar mejor los momentos difíciles” cuando el equipo juega en inferioridad.
El balance fuera del Metropolitano es preocupante: empates ante Alavés, Mallorca y Celta, además de una derrota ante el Espanyol. Todos esos encuentros tienen un punto en común: el Atlético se adelantó en el marcador pero no supo sentenciar. Esos tropiezos han ampliado la brecha con el liderato y amenazan con frustrar las aspiraciones rojiblancas.
Koke fue claro tras el empate en Vigo: “Queríamos ganar, pero hay muchas cosas que mejorar lejos de casa”. Y no le falta razón. El Atlético es un equipo dominante en el Metropolitano, donde arrasa a sus rivales y suma goleadas. Pero esa versión no aparece lejos de su estadio, donde la fragilidad y la falta de contundencia siguen condenándolo.Si quiere pelear por el título hasta el final, el equipo de Simeone debe convertir el susurro visitante en el mismo rugido que retumba en su casa.
La lucha por LaLiga no se decide solo en el Metropolitano. Para que el Atlético dé el salto definitivo y consolide su candidatura, necesita resolver su talón de Aquiles: su bajo rendimiento fuera de casa. Los empates y tropiezos en campo ajeno están costando demasiado y pueden dejarle sin opciones en la recta final. El reto está claro: convertir sus salidas en oportunidades y no en obstáculos.
El Atlético de Madrid ha sumado solo 3 de los últimos 12 puntos posibles a domicilio en LaLiga. Una dinámica que contrasta con el pleno de victorias en casa y que debe cambiar si el equipo quiere mantenerse en la pelea por el título.
Autor: Almudena Reoyo / Instagram: @denarojas_
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