Da igual la pelota
·4 octobre 2025
El CD Leganés le roba el invicto de local al FC Andorra (1-2)

In partnership with
Yahoo sportsDa igual la pelota
·4 octobre 2025
El FC Andorra volvió a chocar con esa versión del fútbol contra un CD Leganés que hizo que doliera, y es que hoy la esferica no entendia de méritos ni de justicia. En el Estadio de Encamp se vivió una noche de emociones extremas: un inicio esperanzador, dos golpes letales en apenas tres minutos, un final que rozó la épica… y una sensación de rabia contra el colegiado Saúl Aís, que dejó al conjunto tricolor con la amarga impresión de haber competido contra once rivales vestidos de verde y otro de negro.
Los de Ibai Gómez comenzaron el partido con la valentía de siempre. Apenas habían pasado 25 segundos cuando Marc Domènech probó los reflejos de Soriano, y poco después Lautaro se topó con el palo cuando ya se cantaba el gol. La grada rugía convencida de que la primera alegría estaba cerca. Esa alegría llegó con el tanto de Alende, que desató la locura tricolor… hasta que el VAR y Saúl Aís intervinieron para señalar un fuera de juego milimétrico. Fue el primero de varios golpes arbitrales que calaron hondo en el ánimo local.
Al descanso, el 0-0 era un castigo para un Andorra que había hecho méritos de sobra y que se había sostenido en el debutante Owono, decisivo con varias paradas. Pero lo peor estaba por venir.
Nada más comenzar la segunda mitad, el Leganés silenció el Estadio de Encamp con dos genialidades consecutivas. En el 47’, Duk sacó un libre directo imparable que se clavó en la escuadra. Apenas tres minutos después, Naim inventó una jugada personal que terminó con un latigazo cruzado. En un abrir y cerrar de ojos, el Andorra se encontró con un 0-2 demoledor.
Cualquier otro equipo habría bajado los brazos, pero no este Andorra. Ibai Gómez agitó el banquillo, dio entrada a Álex Calvo, Jastin y Álvaro Martín, y el equipo recuperó el pulso. Soriano sostuvo al Leganés con intervenciones decisivas, y cuando los tricolores por fin lograban marcar, otra vez el árbitro aparecía para anular el tanto por fuera de juego. En la grada empezaba a crecer la sensación de que Saúl Aís no medía con el mismo rasero.
A cuatro minutos del final, Gael Alonso encendió al estadio con un cabezazo tras un córner botado por Sergio Molina. El 1-2 devolvía la esperanza y el Andorra se lanzó con todo. Villahermosa, ya en el descuento, rozó el empate con un disparo que lamió el larguero. Medio estadio cantó gol antes de tiempo.
Pero la ilusión duró poco. En el minuto 96, Petxarroman vio dos amarillas en apenas un minuto y dejó al equipo con diez. La expulsión, tan rigurosa como inoportuna, terminó por sentenciar las últimas opciones de un Andorra que se sintió traicionado por el criterio del colegiado. El enfado con Saúl Aís era evidente en jugadores, banquillo y grada.
El pitido final certificó la derrota (1-2), pero también dejó un poso de indignación. En el Principado quedó la sensación de que el Andorra había competido de tú a tú, que mereció al menos un punto, y que más allá de los dos golazos del Leganés, el arbitraje inclinó la balanza en momentos clave. La gente abandonó el Estadio de Encamp entre aplausos a los suyos y silbidos hacia el juez de la contienda.
El Andorra se marcha herido, consciente de que peleó con orgullo, de que nunca dejó de creer y de que cayó por detalles que escapan a lo futbolístico. En el recuerdo, dos golazos visitantes; en el corazón, la rabia por un arbitraje que quemó a todo un estadio. Y esto fue el FC Andorra 1 – CD Leganés 2
Autor: IzanDHH.
Sígueme en @izandhh y sigue toda la información y actualidad deportiva en X: @daiguallapelota, y en Instagram: @daiguallapelota.