Hay sorpresa, lo de Pablo Torre nadie lo esperaba: 'El Barça da con la tecla para...' | OneFootball

Pablo Torre ha vivido un 2025 complicado en el FC Barcelona. Apenas ha tenido minutos, y parecía que lo suyo iba a ser salir cedido para buscar continuidad, pero las cosas han tomado un rumbo inesperado. El Barça da con la tecla para forzar su salida y hacer hueco a nuevos fichajes, pero con cuidado: no todo está decidido para el joven mediocentro.

Un año difícil para Pablo Torre

Con solo 142 minutos en toda la temporada, la presencia de Pablo en el campo ha sido casi testimonial. En el Barça, la competencia en el mediocampo es feroz: Dani Olmo, Gavi, Fermín López y Raphinha le han cerrado prácticamente las puertas. Aun así, el jugador de 22 años descartó salir cedido en enero, a pesar del interés de Sevilla, Girona y Betis.

La situación de Pablo Torre en el Barça | Getty Images

Su temporada pasada en Girona no fue fácil, y preferiría quedarse a pelear por un puesto en la plantilla azulgrana, aunque las oportunidades no abunden.

La renovación que puede cambiarlo todo

El contrato de Pablo Torre termina en 2026, y el Barça sabe que tiene un jugador con mucha proyección. Por eso, antes de plantear cualquier cesión, la idea es renovar para ampliar el contrato y proteger su futuro.

Esto también tiene sentido económico: el club pagó 5.5 millones por él en 2022 y no quiere regalarlo. Además, su cláusula de rescisión es de 100 millones, una barrera importante para cualquier equipo que quiera ficharlo este verano.

Flick, la última palabra

Hansi Flick no garantiza más minutos a Pablo, pero tampoco cierra la puerta. Será el rendimiento y la actitud del jugador lo que determine su rol en la próxima temporada.

Al contrario de Ansu Fati, cuyo futuro está más en el aire por otros motivos, Pablo tiene claro que su lucha es dentro del campo. La directiva y el entrenador hablan con él para definir qué esperar, dejando la decisión en manos del jugador.

¿El Barça da con la tecla para forzar su salida?

Aunque el club quiere dar oportunidades, la realidad es que también necesita liberar espacio para nuevos fichajes. El Barça da con la tecla para forzar su salida y hacer hueco a esas nuevas incorporaciones.

Así que la clave está en un posible préstamo con renovación de contrato, para no perder a Pablo y que siga creciendo. No es un adiós, sino una pausa estratégica.