Isco pasa por el quirófano para acelerar su recuperación | OneFootball

Isco Alarcón ha dado un paso decisivo en su proceso de recuperación. El futbolista del Real Betis se sometió en la tarde de hoy a una artroscopia en el tobillo derecho con el objetivo de poner fin a las molestias que arrastraba desde hace semanas. La intervención se ha realizado tras comprobar que el tratamiento conservador inicial no ofrecía la evolución esperada, una posibilidad que ya estaba contemplada desde el inicio por el cuerpo médico del club.

En una primera fase, Isco siguió un plan terapéutico basado en infiltraciones de factores de crecimiento, una técnica habitual para tratar problemas articulares y reducir la inflamación. La intención era evitar el paso por el quirófano y facilitar una recuperación progresiva. Sin embargo, la persistencia de las molestias y la falta de mejora clínica llevaron a replantear la estrategia. De forma consensuada, el jugador, el doctor Leyes y los servicios médicos del Real Betis decidieron adelantar la intervención quirúrgica.

La artroscopia realizada consiste en una limpieza articular de la zona afectada, un procedimiento mínimamente invasivo que permite eliminar restos inflamatorios y mejorar la movilidad del tobillo. Este tipo de intervención suele ofrecer buenos resultados en futbolistas de alto nivel, aunque los plazos de recuperación pueden variar en función de la respuesta individual y de la carga posterior de trabajo. Desde el club insisten en que el tiempo de baja dependerá exclusivamente de la evolución del jugador en las próximas semanas.

La operación llega en un momento delicado para Isco, que estaba volviendo a ser una de las grandes referencias del Betis antes de la lesión. Su liderazgo y su peso en el juego del equipo lo habían convertido en una pieza clave para Manuel Pellegrini, tanto dentro como fuera del campo. La ausencia del malagueño ha sido notable en el rendimiento colectivo, especialmente en la creatividad y en la pausa en los metros finales.

El cuerpo técnico seguirá de cerca cada fase de la recuperación. La prioridad es que Isco regrese en plenas condiciones y sin riesgo de recaída, incluso si eso implica alargar los plazos previstos. En Heliópolis son conscientes de la importancia del jugador a medio y largo plazo, por lo que no se asumirá ningún riesgo innecesario con su estado físico.

Ahora comienza una nueva etapa en el proceso. Isco iniciará en los próximos días la fase de rehabilitación y readaptación al esfuerzo, con trabajo específico y control médico constante. El Betis espera que esta decisión marque un punto de inflexión y permita al centrocampista dejar atrás definitivamente el problema en el tobillo. La evolución marcará los tiempos, pero el objetivo está claro: volver a ver a Isco liderando al Betis sobre el césped cuanto antes.