Julio Lopardo: Sin refuerzos, sin ventas y con foco en la estabilidad económica | OneFootball

En declaraciones exclusivas brindadas al programa Boedo en Mi, conducido por Beto Espiño, el dirigente de San Lorenzo, Julio Lopardo, brindó definiciones clave sobre el presente institucional y deportivo del club de Boedo. La entrevista dejó en claro que el panorama para el próximo mercado de pases estará marcado por la austeridad y la estabilidad financiera.

Según adelantó Lopardo, “en este mercado de pases no se va a incorporar ningún jugador”. Esta afirmación confirma que el club no realizará fichajes en la ventana de transferencias actual, una decisión que responde a la situación económica del club y a la necesidad de consolidar el plantel ya existente.

Además, el dirigente explicó que en el corto plazo no se pagarán las inhibiciones que pesan sobre la institución. La prioridad, detalló, será “mantener al plantel al día y atender los gastos operativos”. Esto implica una estrategia centrada en la preservación del grupo actual de jugadores y en garantizar el funcionamiento básico del club.

Por otro lado, Lopardo fue enfático al afirmar que “San Lorenzo no va a vender a ningún jugador, salvo que se quiera ir ejecutando la cláusula”. De esta manera, se busca evitar la desarticulación del equipo, aunque se deja abierta la puerta a posibles salidas si algún futbolista decide irse mediante el pago de su cláusula de rescisión.

Como parte de una gestión que busca mostrarse transparente, Lopardo también anunció que a partir del martes informará lo realizado en estos 70 días al frente del club. Se espera que dicho informe incluya detalles sobre las decisiones económicas adoptadas, el estado financiero de la institución y los pasos a seguir en los próximos meses.

Las palabras de Lopardo marcan un giro hacia una administración más cautelosa y enfocada en la consolidación interna. Mientras tanto, la hinchada azulgrana aguarda con expectativa el informe prometido, en un contexto donde el equilibrio económico parece haber ganado la pulseada a los refuerzos de nombres rutilantes.