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·9 avril 2025
Manolo Lama dice basta, saca a la luz los trapos sucios de Vinícius Júnior: 'Es in...'

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·9 avril 2025
Vinícius Júnior ya no es intocable. Lo que antes era admiración absoluta se ha transformado en duda y decepción. El brasileño, que hace apenas unos meses era ovacionado como el alma del Real Madrid, hoy empieza a ser silbado por su propia afición.
El Santiago Bernabéu ha cambiado el gesto, la paciencia se agota. En los últimos partidos en casa, los pitos hacia el extremo han sido evidentes, no es casualidad. El rendimiento no está a la altura.
El periodista Manolo Lama lo dijo claro en El Tertulión de la COPE: “A Vinícius hay que exigirle mucho más de lo que está ofreciendo”. Y no es una crítica aislada. Es un síntoma de que algo no funciona.
La situación de Vinícius | Getty Images
Lama fue todavía más contundente: “El 31 de diciembre todos decían que la estrella del Madrid era Vinícius, ni siquiera hablaban de Mbappé. Ahora, hay que pedirle”. Palabras que han hecho ruido en el vestuario y fuera de él.
La falta de autocrítica, la actitud en algunos partidos, y el bajo aporte en momentos clave están empezando a cansar. No se trata solo de talento. Se trata de compromiso.
Manolo Lama no solo habló del nivel futbolístico de Vinícius. Fue más allá. En Tiempo de Juego, recordó un gesto que ha levantado ampollas en el madridismo: la actitud del brasileño tras la derrota ante el Valencia (1-2).
“Un futbolista que palma 1-2 no puede anteponer su nombre y su éxito por encima del Real Madrid”, soltó Lama con un tono de indignación que no pasó desapercibido. Y añadió, molesto: “Es inexplicable”.
¿Qué ocurrió? Tras el pitido final, Vinícius se quedó en el centro del campo, cabizbajo… pero no por la derrota. Las cámaras lo captaron más pendiente de las polémicas personales, que del mal momento del equipo. Su gesto, para muchos, fue más un acto de victimismo que de autocrítica.
La temporada entra en su fase más decisiva. Europa y LaLiga se juegan en pocas semanas. El Madrid necesita líderes, jugadores que den la cara y Vinícius está obligado a ser uno de ellos.
Los números no le acompañan: dos goles en los últimos nueve partidos. Poco para quien debía ser la referencia ofensiva. La energía, el desborde y la alegría que caracterizaban su juego parecen haberse esfumado.
El desgaste físico, la presión mediática, las constantes polémicas... todo suma, pero el fútbol no espera. El Bernabéu no regala aplausos eternos, o rindes, o te pitan.
Vinícius tiene calidad de sobra para revertir la situación, pero necesita reaccionar ya. El mensaje de Lama no es solo una crítica, es un aviso. Y quizás, también, una última llamada.