Más cercano el adiós de Pepiño | OneFootball

Lo que parecía un mes de enero tranquilo para la dirección deportiva del Celta tal vez no lo sea tanto. Las primeras tareas para Marco Garcés serán las de dar salida a jugadores con los que no se cuenta o que actualmente no forman parte de la plantilla pero pertenecen al club. En el primero de estos casos nos encontramos con Joseph Aidoo, cuyo contrato concluye el próximo 30 de junio, pero parece que su destino está lejos de Vigo.

El central africano vivió un momento muy duro con la lesión sufrida durante la disputa de un amistoso con la selección de Ghana ante la de México en Estados Unidos. Aquel día sufrió una grave lesión, la rotura del tendón de Aquiles, que ha cambiado por completo su carrera. Desde entonces apenas ha vuelto a jugar en el Celta. Tras recuperarse las inseguridades le impedían rendir a su mejor nivel, y en su cesión al Real Valladolid tampoco pudo reflotar su carrera. Esta temporada ha jugado poco, aunque ha mejorado las sensaciones, pero en Príncipe entienden que su ciclo en el Celta está cerrado.

Así las cosas la intención del club es rescindir su contrato para que pueda firmar libremente por otro equipo, y según informa este lunes El Desmarque la intención es negociar amistosamente con el jugador la finalización de su contrato, que incluye un salario bruto anual de 1,6 millones de euros, de los cuales ya han sido abonados 800.000. La intención del Celta es negociar con el jugador el pago de una parte de ese salario pendiente, para que pueda ser libre y negociar con otro equipo ya con la carta de libertad.

Estos días informaba Óscar Méndez que el jugador cuenta con una oferta de un club de Primera División y dos de la categoría de plata, que podrían sufragar la parte restante del salario acordado con el jugador para esta temporada. El defensa ghanés llegó a Vigo en el verano de 2019, procedente del Genk, y ha disputado desde entonces 142 partidos oficiales, durante los cuales Pepiño se ganó el cariño de la afición.