Salas y un nuevo retorno al Cilindro de Avellaneda | OneFootball

El duelo entre River y Racing por los octavos de final del Torneo Clausura no será un partido más. Para el equipo dirigido por Marcelo Gallardo, el choque en el Cilindro representa mucho más que un boleto a la siguiente ronda: es la oportunidad de seguir en carrera hacia la Copa Libertadores 2026, un objetivo indispensable para cerrar un año turbulento. En ese contexto, uno de los nombres que más ruido genera es el de Maximiliano Salas, quien volverá a pisar el estadio de su exclub en medio de una fuerte tensión institucional y emocional.

La presencia de Salas será el foco principal del ambiente hostil que se espera en Avellaneda. Tras ejecutar su cláusula de rescisión para abandonar Racing y firmar con River, su salida generó una marcada fractura entre la dirigencia, el plantel académico y los hinchas. Gustavo Costas no evitó profundizar ese malestar al recordar que “el otro club”, en referencia a River, “lastimó mucho” a Racing durante la pretemporada. Para el entrenador, la partida de Salas fue un golpe decisivo en la caída del proyecto deportivo.

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El desafío emocional de Salas y la tensión en torno al clásico

Pese al revuelo que generó su salida, Salas ya demostró personalidad para afrontar este tipo de escenarios. En el cruce por Copa Argentina en Rosario, donde recibió insultos y fue tildado de “traidor”, el delantero respondió con profesionalismo: no celebró su gol y mantuvo un gesto de respeto hacia sus excompañeros, aunque el tanto significó la eliminación de la Academia. Ahora, en el Cilindro y en un partido decisivo, deberá superar una prueba aún mayor.

El clásico también tendrá otros condimentos. Marcos Acuña regresará al estadio donde ya fue reprobado anteriormente, y su reciente participación en el final caliente del último enfrentamiento incrementa la tensión. Juan Fernando Quintero, otro de los jugadores que generó malestar en Racing con su llegada a River, también estará bajo la lupa en Avellaneda.

Para Gallardo, recuperar la mejor versión de Salas es una prioridad absoluta. El delantero es clave en un equipo que atraviesa una crisis futbolística y necesita de sus figuras para sostener la ilusión de clasificación. En un partido sin margen de error, la actuación del ex Racing será determinante tanto dentro como fuera del campo.