Sheffield Wednesday se declara en banca rota | OneFootball

Un nuevo golpe sacude al fútbol inglés. El Sheffield Wednesday, uno de los clubes más antiguos de Inglaterra y actual participante en la Championship, se ha declarado oficialmente en concurso de acreedores tras no poder hacer frente a sus compromisos financieros. La noticia, confirmada mediante un expediente judicial presentado este viernes, marca uno de los momentos más críticos en la historia reciente de la institución.

El Sheffield Wednesday, fundado en 1867 y con más de 150 años de historia, atraviesa una situación límite. La Liga Inglesa de Fútbol (EFL) ya había señalado en junio varias infracciones financieras, principalmente relacionadas con el retraso en los pagos salariales de su plantilla.

Sheffield Wednesday

Photo by James Fearn/Getty Images

En las últimas dos temporadas, el club había recibido embargos y sanciones por irregularidades contables, además de una deducción de seis puntos en 2020-21 por incumplir las normas de beneficios y sostenibilidad. Ahora, la entrada en concurso de acreedores implica una penalización automática de 12 puntos, que complica aún más su panorama deportivo.

El conjunto de Hillsborough vive una pesadilla en el terreno de juego. Tras cerrar la temporada pasada en una discreta 12.ª posición, este curso el Wednesday ocupa el último puesto de la tabla, con apenas seis puntos y una sola victoria en 11 partidos.

Con la sanción que se avecina, el club quedará prácticamente condenado a luchar por evitar un descenso que podría tener consecuencias devastadoras tanto a nivel deportivo como institucional.

Los hinchas del Sheffield Wednesday no han tardado en expresar su indignación. En los alrededores del estadio Hillsborough, centenares de aficionados se manifestaron en protesta contra la gestión del propietario Dejphon Chansiri, a quien acusan de haber llevado al club al borde del colapso financiero.

“Nos prometieron estabilidad y ambición, pero nos han dejado una montaña de deudas”, se leía en una de las pancartas exhibidas por los seguidores durante la protesta del viernes.

Según fuentes judiciales, la presentación del concurso busca proteger los activos del club mientras se negocia un plan de viabilidad económica con la EFL y los acreedores principales. Por el momento, el organismo rector del fútbol inglés no ha emitido un comunicado oficial sobre las medidas adicionales que podría tomar.

Expertos legales advierten que, si no se logra un acuerdo de reestructuración en los próximos meses, el Sheffield Wednesday podría enfrentarse a un proceso de venta forzosa o incluso a la disolución administrativa.

El Sheffield Wednesday es uno de los clubes más emblemáticos del fútbol británico, con cuatro títulos de liga, tres FA Cups y una Copa de la Liga en su palmarés. Su caída en desgracia refleja los riesgos de la gestión económica ineficiente en un fútbol cada vez más dependiente de la inversión privada.

A día de hoy, los aficionados solo tienen una certeza el futuro del Wednesday pende de un hilo. La combinación de malos resultados, deudas crecientes y sanciones deportivas amenaza con poner fin a una historia que ha sido parte esencial del fútbol inglés durante más de un siglo y medio.