1 de 8. ¡Vamos paso a paso! | OneFootball

Esta es la primera de los que espero sean 8 entradas. 8 partidos para sacar campeón a Radamel, David, Nicolás, Danovis, Álvaro, Helibelton y a todo el plantel que sueña con un nuevo título en su palmarés.

También 8 partidos para sacarnos campeón a usted y a mi, que aunque no estamos en el campo de juego también hacemos sacrificios económicos, de tiempo y comprometemos nuestro estado anímico siguiendo desenfrenadamente esta pasión. Usted y yo también merecemos ser campeones.

Fijo van a ser 6 entradas, pero anhelo que sean 8 y que en esa octava haya una sola palabra que la titule. Esa palabra que se sueña siempre al inicio de semestre, que se repite poco y que es tan esquiva que puede tardar años, décadas e incluso centenares (a propósito del reciente título de Platense).

Arrancamos con pie derecho. La primera de esas 8 entradas nos deja contar una nueva historia de un clásico capitalino en cuadrangulares, en el que vencimos de visitantes al rival de patio con un gol del inacabable Radamel Falcao García Zarate (tantas veces me mataron, tantas veces me morí…).

Triunfazo opacado por la polémica arbitral. Si bien ganamos ante un rival que no mostró fútbol, las jugadas pitadas y no pitadas por el señor Carlos Ortega quedaron en la retina de los espectadores y empezaron a generar una serie de comentarios y conjeturas que están sonando mucho en este momento.

Algunos de ellos los estoy disfrutando. Desde el «Dimayorazul» hasta «quieren sacar campeón a Falcao», la comunión de rojos y verdes en torno a Millonarios se vuelve a hacer presente y sus lagrimas ya empiezan a inundar a Colombia. Respecto a eso solo un comentario: no es culpa de Millonarios el desastroso nivel arbitral que hay en Colombia, que hoy te quita pero mañana te da.

Pero acá hablamos de fútbol. El partido de los dirigidos por David Gónzalez fue muy bien trabajado. Se supo sufrir en los primeros 15 minutos ante la arremetida del local, generar fútbol directo y de elaboración cuando correspondía, y defenderse en un bloque bajo cuando el rival intentaba acercarse al arco de Montero. Las llegadas fueron más errores propios que méritos del rival.

Varios puntos altos en el partido. Los dos centrales, sólidos por arriba y por abajo, compaginandose con sus volantes y laterales para liderar la defensiva; Daniel Ruíz y Nicolás Arevalo como directores de orquesta, pidiendo la pelota y manejando los hilos del equipo; un Radamel Falcao en lo suyo, en los goles y en la jerarquía que imprime su sola presencia; un David Gónzalez líder, que leyó los momentos del partido y administró favorablemente su nómina.

Al final un buen resultado que debe ratificarse el jueves contra Atlético Nacional, porque de nada servirá lograr estos triunfos de visitante si de local no hacemos respetar nuestra casa. Ese será el capítulo 2 de 8, una historia que esperemos también se pueda escribir con la misma alegría con la que se hizo esta primera entrada.

1 de 8 y vamos por una nueva ilusión, siempre con mesura y humildad pero con la fe puesta en este equipo, que avanza como lo dicta el buen ‘Mostaza’: Paso a paso.

Por Andrés Rey Hernández @andresreyhdez