Andrés Castrín: «El CD Lugo es mi casa» | OneFootball

Tras meses de adaptación, de dar pasos firmes pero silenciosos y de abrirse camino entre el primer y segundo equipo, Andrés Castrín encara el que puede ser uno de sus partidos más especiales con el Sevilla FC estando en el foco de las noticias. El central, que llegó el pasado curso procedente del CD Lugo, ha logrado convencer a buena parte del sevillismo, hasta el punto de que muchos ya reclaman verlo con más continuidad en el once. En esta parte de la entrevista en exclusiva para La Colina de Nervión, el defensor mira atrás y se detiene en una etapa que marcó profundamente su carrera: su paso por el CD Lugo, club del que llegó a ser capitán y al que aún guarda un cariño inmenso. Entre recuerdos, aprendizajes y una afición que sigue sintiendo como propia, Castrín nos habla de cómo vivió aquellos años en el Anxo Carro. 

El crecimiento hasta llegar al Sevilla FC

El paso de Andrés Castrín por el CD Lugo fue mucho más que una etapa deportiva y estuvo llena de buenas noticias para el jugador del Sevilla FC: fue el lugar donde se formó como futbolista y como persona. A pesar de su juventud, mostró una jerarquía notable y un sentido de pertenencia que lo llevó incluso a portar el brazalete de capitán, un símbolo que marcó su crecimiento en el club. Sobre ello, Andrés explicó: “Bueno, el Lugo para mí es mi casa. Desde pequeñito, desde los ocho años estaba allí. Era mi décimo año en el Lugo, hace dos temporadas, y fui quemando todas las etapas. Para mí, llegar al primer equipo fue el sueño de todo niño. Tuve la suerte, en algún partido, de llevar el brazalete. Para mí fue lo más grande… La verdad es que muy contento”.

Andrés Castrín repasa las noticias del Sevilla FC durante la entrevista en exclusiva con La Colina de Nervión. | Imagen: Ana Reyes/La Colina de Nervión

Un legado de valores que no se pierde

El cariño que la afición del Lugo le mostró desde el primer día dejó huella en él y forma parte de su identidad competitiva actual, que le está ayudando a darle grandes noticias a la afición del Sevilla FC. Castrín mantiene un recuerdo luminoso de aquella etapa, marcada por aprendizajes, cercanía y un vestuario que funcionaba como una familia. Sobre su paso por el club, Andrés comentó: “Pues yo, para mí, es que me vienen solo cosas buenas. Como bien os dije, es el club en ese aspecto de mi vida. Tuve la suerte de compartir el vestuario con los eternos capitanes… entiendes lo importante que transmiten esos valores”. Además, explicó que esos principios siguen guiándolo: “El sacrificio, el trabajo… lo intento trasladar a todas las facetas y en cada momento allí donde estoy”.