Arda Güler cumple con los planes del Real Madrid | OneFootball

El futbolista turco progresa en su reinvención a centrocampista tal y como tenía pensado el club: Xabi Alonso que ha querido acelerar el proceso

Desde que Arda Güler aterrizó en el Santiago Bernabéu, su perfil técnico y su lectura del juego llamaron poderosamente la atención de los técnicos del club. Aunque en Turquía despuntaba como mediapunta o extremo con llegada, el Real Madrid tenía otros planes para él a largo plazo: convertirlo en un centrocampista más completo, capaz de aportar entre líneas pero también de organizar desde zonas más bajas del campo. Un proceso que se esperaba gradual, coincidiendo con las salidas de Luka Modrić y Toni Kroos. La llegada de Xabi Alonso ha sido un catalizador: el técnico tolosarra ha querido acelerar la transición, convencido de que puede obtener lo mejor de Güler tanto en la construcción como en la finalización.

Pero para llegar a este punto, Arda ha tenido que atravesar un camino empedrado. Sus dos primeras temporadas en el Real Madrid estuvieron marcadas por la escasez de oportunidades. Las jerarquías inamovibles de Carlo Ancelotti, sumadas a un modelo menos atrevido con los jóvenes, limitaron su presencia. Aunque dejó destellos, nunca logró continuidad. Ahora, con otro contexto, otro cuerpo técnico y otra mirada futbolística, Güler empieza a cumplir con la hoja de ruta que el club trazó con su incorporación.

Xabi Alonso ‘impulsa’ a Arda Güler

En Valdebebas sabían que Arda Güler no era solo un mediapunta brillante. Desde su etapa en el Fenerbahçe ya se le reconocían dotes de organizador. La idea del club era clara: una vez se cerrara el ciclo de Kroos y Modrić, habría espacio para que jóvenes con talento creativo asumieran responsabilidades en la medular. Güler era uno de esos nombres.

La duda, sin embargo, siempre estuvo presente: ¿su desplazamiento al centro del campo no le haría perder ese ‘plus’ que puede aportar en los últimos metros? ¿No era más útil cerca del área, donde podía marcar diferencias con su zurda y su imprevisibilidad? Xabi Alonso, que sabe bien lo que implica dominar el juego desde la base, parece tener una respuesta: Güler puede hacerlo todo.

Richard Pelham/Getty Images

En el arranque de esta temporada, el técnico ha apostado por situarlo más retrasado, con funciones de constructor, pero dándole libertad para incorporarse al ataque. Lo considera un perfil híbrido, capaz de romper líneas desde la conducción, repartir juego y definir. Un “8” con alma de “10”.

Los primeros partidos de este nuevo Real Madrid lo confirman. Ya en la fase de grupos del Mundial de Clubes, Güler fue el jugador con más toques de balón y más recuperaciones en el equipo hasta el momento de su sustitución. En el primer encuentro oficial de la nueva y presente campaña ante el CA Osasuna, Güler continuó cumpliendo su rol. Siempre sobresaliente.

De la espera a la reivindicación

Para llegar a este punto, Arda ha tenido que ser paciente. Sus dos primeras campañas en Chamartín estuvieron marcadas por la falta de continuidad. En la 2023-24, su año de debut, apenas sumó 440 minutos oficiales, la mayoría de ellos cuando la Liga ya estaba decidida. No llegó ni siquiera a debutar en Champions League, pese a que el equipo levantó su decimoquinta Orejona. El propio jugador confesó en su entorno que no sentía esa copa como propia. Una muestra de su ambición y sentido de pertenencia.

La temporada siguiente (2024-25) mostró un leve avance, pero aún insuficiente: 43 partidos disputados, sí, pero con apenas 1975 minutos en total. Eso se traduce en un 37% de los minutos posibles en LaLiga, y un pobre 11% en Champions League. En cuanto a titularidades, tan solo fue de inicio en el 37% de los partidos ligueros y en apenas el 7% de los europeos -teniendo en cuenta que la plantilla contó con numerosas bajas-.

A pesar de ello, nunca se le escuchó una queja, un gesto feo, una palabra fuera de tono. Trabajó en silencio, sin escándalos ni distracciones. Supo esperar su oportunidad.

Ahora, con apenas 20 años, Arda Güler empieza a justificar con hechos la apuesta que el Real Madrid hizo por él. Está cumpliendo con el plan que el club diseñó, con una versión aún más completa de la que muchos imaginaron. Xabi Alonso ha apostado fuerte por él, y todo apunta a que no será por unos cuantos partidos: huelen a pilar fundamental.

La era post-Kroos y post-Modrić ya está aquí. Y Güler, con personalidad y talento, está listo para liderarla.