Brahim se gana el puesto | OneFootball

Brahim Díaz saca la cabeza del agua. Poco a poco. Este miércoles, el internacional marroquí fue providencial en la victoria del Real Madrid ante la Juventus de Turín. Salió de titular: algo que no pasaba desde el 13 de septiembre (contra la Real Sociedad, en Anoeta). Y no decepcionó. Aunque el extremo derecho no marcó –tampoco asistió–, el ’21’ de los blancos ha dejado muy buen sabor de boca. Buscó tumbar la casa durante todo el partido. Tiró a puerta unas tres veces (de cuatro intentos). Pero Di Gregorio fue su pesadilla, y la de Mbappé. El cancerbero italiano sacó manos que ni las gradas del Bernabéu se lo creían. El bianconero fue imperial. Gatti, también. El central le sacó un disparo en la línea al malagueño pasado el ecuador de la segunda parte. No se lo podía creer.

Los números de Brahim contra la Juventus

En 84 minutos disputados, Brahim Díaz volvió a dejar su firma ante la Juventus. Activo entre líneas, preciso en la entrega y con criterio cada vez que tocó el balón, completó 45 de 51 pases (88%), con una notable eficacia en campo rival (39/44, 89%). Su lectura entre espacios fue clave para dar fluidez al ataque blanco, creando una ocasión clara y sumando dos pases determinantes en zonas de peligro.

El malagueño no se limitó a generar juego: también aportó intensidad en las tareas defensivas. Ganó una entrada (la única que tuvo), realizó dos recuperaciones y despejó una acción comprometida. En los duelos mostró carácter –tres ganados de ocho por bajo y uno de dos en el juego aéreo–, dejando claro que su compromiso defensivo acompaña a su creatividad con el balón. Una actuación redonda, en 84 minutos que pasó en el césped del Santiago Bernabéu.

Rival directo de Franco Mastantuono

Por ahora, Brahim Díaz le está ganando el pulso a Franco Mastantuono. Y eso que el ’21’ tiene menos oportunidades que el argentino. Este curso, el internacional marroquí suma 327 minutos con los merengues y recopila ya un tanto y dos asistencias. Por su parte, Franco ha superado los 600 minutos y ha facturado una diana y un pase de gol. O sea, el malagueño, con menos de 270 minutos que su compañero, apunta mejores estadísticas.

Porque hasta ahora, Franco ha sido indispensable para Xabi Alonso. El ex de River Plate ha sido titular ocho veces en los 12 partidos que se han jugado hasta ahora. Brahim apenas acumula tres titularidades este curso. Pero él no se ha rendido nunca. Después del varapalo contra el Atlético de Madrid (no jugó, y tampoco lo hizo contra el Levante antes del Derbi), el extremo derecho se reivindicó con gol ante el Kairat Almaty (saliendo desde el banquillo) y con asistencia contra el Villarreal (también saliendo del banquillo). Contra el Getafe, solamente jugó cinco minutos, pero el tropiezo de Mastantuono le abrió una autopista para la Champions.

Brahim no se rinde

Y siempre que le dan una oportunidad, Brahim cumple. Él sabe mejor que nadie lo que es pelear por su puesto. Desde que llegó a Valdebebas, el internacional marroquí nunca lo tuvo fácil. Nadie le regaló nada. Tanto, que tuvo que forjarse en San Siro con el AC Milan durante tres temporadas. Pero el malagueño siempre lo tuvo muy claro, y eso desde su ‘primera presentación’ como blanco en el año 2019: «Tenía tres opciones sobre la mesa tras dejar el Manchester City. La primera era jugar en el Madrid, la segunda jugar en el Madrid y la tercera, jugar en el Madrid. No quería ir a ningún otro sitio sino defender este escudo, defender la camiseta de la ambición y dejarme el alma por el mejor club del mundo«.

Ahora, Brahim Díaz es una pieza fundamental del sistema de Xabi Alonso. De hecho, el atacante renovó por petición del tolosarra. Tenía contrato hasta 2027 pero el técnico pidió que se le prolongara su acuerdo. Cosa hecha. El malagueño es una pieza importante del vestuario: por su competitividad pero también por su cercanía. Siempre es el que acoge a los nuevos. Brahim es figura tanto dentro como fuera del verde.