Deco se la juega con Ter Stegen | OneFootball

El director deportivo tomará el mando de una situación cada vez más tensa. El club necesita una respuesta urgente, pero sabe que cualquier movimiento en falso puede salir caro.

Después de semanas marcadas por rumores de salida, una operación en Burdeos y mensajes poco claros sobre su estado físico, el club considera que ha llegado el momento de afrontar la situación con mano izquierda. El responsable de hacerlo será Deco, que ya tiene asignada la tarea de reconducir todo el caso.

El director deportivo se reunirá en los próximos días con Marc-André ter Stegen, recién llegado a la ciudad tras pasar por el quirófano. La recuperación del portero alemán arrancará en Barcelona, pero la gran incógnita sigue sin despejarse: ¿cuánto tiempo estará de baja?

El diagnóstico oficial debe llegar desde un comité médico de LaLiga, pero para que este análisis sea válido, es imprescindible contar con el consentimiento del futbolista. Sin ese paso, el Barça no puede activar un posible alivio salarial que le permitiría liberar hasta el 80% de la ficha del alemán.

Este margen sería clave para inscribir refuerzos como Joan García, Marcus Rashford o Roony Bardghji, así como cerrar la renovación de Wojciech Szczesny. Pero para llegar hasta ahí, es necesario el acuerdo del guardameta. Por eso Deco quiere dejarle claro que el club le apoya y que no hay ninguna intención de presionarle, aunque sí necesita su colaboración.

El asunto se enredó todavía más cuando Ter Stegen publicó en redes que su baja sería de solo tres meses, una cifra que pone en duda las previsiones médicas del club y que se interpretó como un movimiento para marcar perfil propio. Antes de operarse, en declaraciones a SPORT, aseguró que su relación con el club seguía “intacta”, aunque lo hizo con una sonrisa que no pasó desapercibida en los despachos.

El Barça quiere resolver esta situación con respeto y sin polémicas. Después de once años defendiendo el escudo y siendo una figura clave del vestuario, no se quiere forzar a Ter Stegen ni condicionar su decisión. Pero el club sí espera que entienda lo que está en juego y que, en última instancia, permita que los médicos dictaminen libremente el tiempo necesario para su recuperación. Sin ruido. Sin guerra fría.