El Real Madrid presume de sus internacionales, a pesar de recorrerse todo el planeta en pocos días | OneFootball

Los parones internacionales son verdaderas pesadillas. Sobre todo para los clubes que se quedan desmantelados. Que se lo digan al Real Madrid y a Xabi Alonso. En este parón, 12 jugadores fueron convocados con sus respectivas selecciones. La baja de Dean Huijsen deja las cifras en 11. En el anterior, 13. Con el susto de Lunin nada más llegar a la concentración ucraniana, 12. En total, es más de la mitad de la plantilla que está fuera de la Ciudad Deportiva para disputar partidos con sus naciones. Valdebebas es un desierto. En el club, no le ponen pegas. «Son internacionales y estamos orgullosos de ello. Cuando les fichamos ya sabíamos esto. Así que no es correcto quejarse de nada. Deben ir con sus selecciones y hacerlo lo mejor posible. Son un orgullo para sus países y también para nosotros«, dicen desde dentro.

El Real Madrid toca madera con los internacionales

Pero el Real Madrid no se libra de las posibles lesiones que pueden sufrir sus jugadores. Si bien la anterior ventana FIFA resultó con un ligero susto de Andriy Lunin –que no quedó en nada–, esta nueva brecha internacional ya ha dado problemas al club blanco. La lesión de Dean Huijsen en el sóleo –estará entre 12 y 15 días de baja y llegará justo para el Clásico, según comunican en Chamartín– ha vuelto a encender a la afición madridista.

En el club ya calificaron de «insufribles» las jornadas de parón. Pero porque no hay nadie para trabajar en los campos 1 y 2 de Valdebebas. Es un desierto. Amén de eso, Xabi Alonso sigue entrenando con los efectivos que le quedan. Utiliza a futbolistas de los filiales o del Juvenil A para completar sus oposiciones. Improvisa incluso ‘partidillos’ con el Castilla. También deja descanso a sus jugadores. De jueves a lunes, días libres. Hasta que, poco a poco, recuperen sus pupilos.

Los sudamericanos, en la lupa

Con todos los futbolistas, el Real Madrid toca madera para que vuelvan a Valdebebas sin ningún percance. Sobre todo con los sudamericanos, que se han ido de Europa para jugar… partidos amistosos. Franco Mastantuono está a más de 7.000 kilómetros de la capital española. Argentina ya está clasificada para el próximo Mundial y ya se está preparando para dicha cita. Por lo tanto, la vigente campeona del mundo organizó dos encuentros: uno contra Venezuela y otro contra Puerto Rico. Franco se fue a Estados Unidos con «una sobrecarga en el isquio«, pero todo ‘ok’. El club estará atento.

Para Vinicius, Rodrygo y Éder Militão, el escenario se repite. Brasil está clasificada para el Mundial y también quiere preparar la cita. Carlo Ancelotti y sus pupilos jugarán entonces dos partidos amistosos… a más de 10.000 kilómetros de Madrid. Contra Corea del Sur en Seúl el 10 de octubre. Ante Japón, en Tokio, el 14. Unos viajes interminables, en muy pocos días. Se recorren medio planeta. Valdebebas reza para que no pase nada.

Pero como rezan para que ningún internacional vuelva con lesiones. Ya han tenido suficiente con Huijsem. Kylian Mbappé también dio el susto tras llegar a Francia con unas molestias en el tobillo. No obstante, el killer afirma que se siente bien y que, por ende, quiere jugar.

Evitar los casos Militão

Lo que sí quiere evitar el Real Madrid es otro caso Militão. Durante el parón internacional de octubre de 2024, Éder viajó a Brasil para disputar las eliminatorias del Mundial. Sin embargo, arrastraba molestias en el muslo izquierdo. Secuelas de un duro Derbi madrileño días antes. El 5 de octubre, participó 20 minutos contra el Villarreal, pero se le notaba incómodo. El Real Madrid le diagnosticó y comunicó la situación a la Federación Brasileña (CBF). A pesar de ello, fue convocado y enviado a São Paulo, donde los médicos de la canarinha confirmaron el parte médico de Valdebebas. Eso, tras un viaje de 12 horas. Ida y vuelta en apenas dos días, 24 horas de vuelo, que no sirvieron de nada. «Hay que acabar con esos abusos«, comentaban. Así que, con que no vuelva a ocurrir este tipo de situaciones, el Real Madrid no dará problemas.