El Sporting y una expulsión de locos | OneFootball

No solemos hablar habitualmente de acciones surrealistas en fútbol, aunque la Hypertensiones es diferente. Que se lo digan al Sporting. De vez en cuando, también deja estampas que rozan lo absurdo, situaciones que parecen sacadas de un guion de Chaplin. Eso fue lo que sucedió en la última jornada con el Real Sporting de Gijón como protagonista y con Guille Rosas en el centro de la escena.

El lateral derecho, canterano y corazón rojiblanco, terminó expulsado de una manera que todavía hoy se sigue comentando en tertulias y redes sociales. Una jugada que descolocó al público y que dejó al Sporting en inferioridad numérica. Una situación que cambió el rumbo del partido.

De una amarilla por pérdida de tiempo a la confusión total

Todo comenzó al borde del descanso. Rosas fue amonestado por el colegiado tras lanzar un balón al terreno de juego, acción que el árbitro interpretó como un gesto de pérdida de tiempo. Una decisión discutible, pero asumible en el fragor del partido.

El verdadero caos llegó en la segunda parte. En el minuto 51, Rosas quedó tumbado fuera del campo, aparentemente tocado, esperando asistencia. El árbitro autorizó que se reanudase el juego, pero el lateral, quizá por instinto o por desconocimiento de la situación, regresó al césped sin solicitar permiso. El árbitro, siguiendo el reglamento, le mostró la segunda amarilla. Y ahí, en ese cruce de miradas incrédulas, nació una de las expulsiones más insólitas que se recuerdan en LaLiga Hypermotion.

Consecuencias de una acción desconcertante

La roja a Guille Rosas supuso un golpe durísimo para el Sporting. No solo porque dejó al equipo con diez en un momento clave, sino porque encendió el debate sobre la aplicación estricta del reglamento y la falta de flexibilidad en una acción tan peculiar.

Foto: Marca

Rosas, que venía siendo importante en los esquemas del Sporting, no estará disponible para la próxima jornada. Un contratiempo añadido a lo decisivo que ya resultó jugar con uno menos durante más de 40 minutos.

Un aprendizaje amargo para el Sporting

El fútbol también enseña desde el error. Para Rosas, esta expulsión quedará como una lección amarga. Pero también como un recordatorio de que en el fútbol profesional, cualquier inconveniente y cada detalle puede cambiar el destino de un partido.

La afición sportinguista, que tantas veces ha sido testigo de hazañas heroicas, asistió a un episodio que nadie olvidará fácilmente. Y quizá, dentro de la frustración, quede la certeza de que el Sporting, como su afición, sabrá levantarse de este revés con más fuerza que nunca.