Racing de Alma
·7 Januari 2025
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·7 Januari 2025
Lautaro Martínez es la gran figura del Inter, no hay dudas. El jugador que está claramente por encima de la media. Es el capitán del club, el máximo referente que tiene el plantel y el de mejor calidad y jerarquía. Incluso terminó, injustamente, en el séptimo lugar del balón de oro. Era para más porque tuvo un 2024 descollante donde fue el jugador más influyente de la Selección Argentina para conseguir la Copa América. Ni hablar de todo lo que hizo en el club italiano, donde ganó todo a nivel local con él como máxima figura y goleador. Ahora la nueva temporada ya lleva seis meses y el conjunto italiano mermó un poco en su poderío a nivel local.
Es cierto que viene peleando arriba en la Serie A, pero ya no saca esa amplia diferencia. Y también se lo ve al ex Racing mucho menos acompañado. Un equipo que no termina de estar a la altura de lo que es hoy uno de los mejores jugadores del mundo. Y el mejor nueve, está claro. Incluso muchas veces este bajón que pegó el equipo lo contagia y por eso estuvo varios partidos sin goles. Algo que no es habitual en él. Sin embargo, siempre dice presente. Aunque en este caso, pese a volver al gol, el sabor no fue el esperado. No sólo por la dura derrota sino por la forma en la que se terminó dando todo. Bastaba con verle la cara de rabia al final para entender lo que le sucedía por dentro.
Lautaro Martínez volvió a ser el mejor del Inter en la final de la Supercopa de Italia que se jugó en Arabia. Ante el Milan, su eterno rival. Pero su golazo para abrir el marcador y poner el 1-0 parcial no alcanzó. Apareció en el momento justo, cuando cerraba el primer tiempo y la cosa no venía bien. Controló, enganchó e hizo pasar a dos de largo. Y con su pierna menos hábil, la puso al primer palo para dejar sin chances al arquero rival. Ideal para irse con ventaja al descanso. Incluso cuando arrancó el ST llegó el 2-0 que parecía sentenciar la historia en el clásico italiano. Pero no. El Milan se lo dio vuelta al Inter sobre la hora y le ganó 3-2 la final.
El ex Racing es amado por los hinchas del equipo italiano. No es para menos. Su enorme nivel es lo que le permite a los tanos soñar con ganar cosas importantes. Porque siempre aparece en las difíciles. Como ayer en la final para abrir el marcador. Pero su arquero tuvo dos fallos claros que le permitieron al rival llevarse dos goles casi gratis. Y eso en una final es casi impagable.
Lautaro Martínez en Inter y lo que pasa con el ex Racing
La bronca por esta final perdida va a durar, es lógico. Se le escapó de una manera inexplicable. Pero ahora en Inter ponen toda la mira en la Serie A y la Champions League sabiendo que cuentan con Lautaro Martínez, el gran guía que tiene este equipo. Claro, sólo no puede...