El Rincón del Fútbol
·23 Januari 2025
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Perdía 2-0 al inico del segundo tiempo pero reaccionó y jugó al póker con un deslucido Manchester City, que llega a la última fecha con más dudas que certezas. En Praga soltaron a “ese Toro enamorado de los goles” y Lautaro volvió a facturar para la victoria interista. Feyenoord llegó a buen puerto con un contundente 3-0 sobre Bayern Münich.
Siguen las remontadas épicas – en especial bajo una lluvia torrencial que hace todo aún más dramático – en el torneo de clubes más importante del “Viejo Continente”. En el Parque de los Príncipes, París Saint Germain le levantó un 2-0 a Manchester City y lo derrotó 4-2 en la penúltima jornada de la fase de liga de la UEFA Champions League.
Separados al nacer pero se juntaron en un mismo terreno de juego con la idea de base que los identifica. De un lado Luis Enrique Martínez, quien prolongó el legado que inició su rival de turno Pep Guardiola, con el culto a la posesión y la circulación plena de la pelota.
Un primer capítulo que tuvo pocas emociones con 2 llegadas claras por bando: los locales primero con Desiré Doué que hizo trabajar a Ederson Moraes y al final del primer tiempo con un gol anulado a Achraf Hakimi por una milimétrica posición adelantada de Bradley Barcola al inicio de la jugada. La respuesta del tetracampeón inglés fue un zurdazo de Kevin De Bruyne que salvó Gianluigi Donnarumma y una nueva atajada del italiano ante una escalada de Savinho por la izquierda.
Los cambios de cara al complemento refrescaron un poco las intenciones y los “Cityzens” se encontraron con una ventaja de 2 goles antes de los primeros 10 minutos. A los 50´, Manuel Akanji incursionó en ataque y se filtró por derecha cual 7 bravo. Centro atrás que Bernardo Silva conectó y una carambola entre Donnarumma y un defensa le dejó servido el gol a Jack Grealish. Pasaron 3 minutos y un buen desborde del rebelde Grealish terminó con un involuntario toque de Joao Neves que no hizo más que habilitar a Erling Braut Haaland, autor del segundo grito sagrado inglés.
Los galos volvieron rápidamente al planeta Tierra porque a los 56´ llegó el descuento. Notable unipersonal de Barcola en la izquierda para desairar a Rico Lewis y meter zancadas largas hacia la tierra prometida. Centro de la muerte y Ousmane Dembelé solamente la tuvo que empujar para el 1-2.
Y a la hora señalada llegó un nuevo impacto local. Terrible derechazo de Doué que fue devuelto por el travesaño y en el rebote de primera Bradley Barcola la mandó al fondo de la red con un remate poco ortodoxo pero efectivo. Dembelé mostró su habiliada y potencia cuando le tiró un túnel subfluvial a Bernardo Silva dentro del área y después le reventó el horizontal a Ederson. Fue el preludio de lo que iba a suceder.
Minuto 78 y redención absoluta para el portugués Joao Neves, quien fue a buscar por el fondo un tiro libre en forma de centro de su compatriota Vitinha y dijo que sí con la cabeza para corregir el rumbo.
De yapa vino con suspenso la rúbrica del 4-2, cortesía del otro luso Gonzalo Ramos. Una disputa aérea entre Hakimi y Gvardiol y la pelota le quedó justita a Ramos, quien facturó sin problemas ante Ederson Moraes. El delantero portugués estaba claramente adelantado cuando partió el pase pero sucede que el toque del balón fue del propio Gvardiol, por lo que el VAR se tomó su tiempo pero convalidó un gol que era totalmente lícito.
Épico triunfo de PSG por la manera pero justo por el ímpetu y el fútbol mostrado desde que el equipo estuvo en desventaja. Preocupante lo de Manchester City que, más allá de no haber aprovechado una diferencia de 2 goles, no supo mantener su idea de siempre y se replegó demasiado en su campo. Ya no es solamente anímico el problema del tetracampeón inglés: parece que la filarmónica ya no suena como antes porque la partitura está cada vez más mojada.
Inter se impuso 1-0 a Sparta Praga de paseo por la capital checa y es casi un hecho que estará en la fase de octavos de final. Otro grito sagrado para Lautaro Martínez, el tercero consecutivo, para alcanzar a un tal Adriano como máximo artillero del “Nerazzurro” en la UCL (ambos tienen 14 tantos).
A los 12´ el bahiense la empezó y él mismo la terminó. Pelota recuperada por Lautaro y el juego terminó en la izquierda para la subida de Andrea Bastoni. Centro al segundo palo y el “Toro” le dio como venía desde un ángulo cerrado: volea de sobre pique y balón al fondo de las mallas. Un verdadero golazo.
Feyenoord goleó 3-0 a Bayern Münich en la ciudad portuaria de Rotterdam y se ilusiona con la clasificación a octavos de final (está en el undécimo puesto con 13 unidades).
Santiago Giménez quebró el cero a los 21 minutos de juego. Largo bochazo de Gijs Smal desde su propio campo y error fatal de Kim Min-Jae en la cobertura. Le quedó al mexicano, que definió sin problemas ante el achique del arquero Manuel Neuer.
Se acababa la primera etapa y un infantil penal de Raphael Guerreiro sobre Calvin Stengs fue aprovechado al máximo por Giménez, quien selló su doblete al minuto 45´+9.
La descollante actuación del guardavallas Justin Biljow sostenía el resultado en favor de los neerlandeses (cuando no fue el arquero, el palo le negó el gol a Leroy Sané) pero una réplica fulminante selló la goleada para los de Brian Priske. A los 89´, un gran pase filtrado de Antoni Milambo dejó solito y solo a Ayase Ueda ante Neuer y el nipón metió un zurdazo cruzado y rasante que sentenció la historia.
Trabajoso éxito de Celtic 1-0 sobre Young Boys en Glasgow, para sumar su tercera victoria en el certamen y quedar con posibilidades para meterse en la fase de play-off. El local tuvo 1 penaly 1 expulsión y recién sobre la hora pudo quebrar la neutralidad helvética gracias a un gol en contra.
A los 40´, Darian Males lo “camiseteó” a Greg Taylor y el referí noruego Saggi señaló el manchón de cal. Arne Engels con la ejecución y Marvin Keller con la atajada salvadora.
La fatalidad llamó a la puerta de Loris Benito a 4 minutos del final. El marfileño Adam Idah quedó cara a cara con Keller y el portero suizo volvió a salvar de manera providencial. Pero el rebote le quedó a Benito, quien se llevó puesta la pelota accidentalmente y la mandó dentro de su propia valla. La adenalina estaba a full en los escoceses y el japonés Daizen Maeda se ganó la roja directa por agresión a instancias del VAR.
Por Emiliano Schiavi / @ejschiavi
(Foto Principal: @YanisGBA para @PSG_inside)