Reunión de alta tensión: Laporta da la cara ante Dani Olmo y Pau Víctor | OneFootball

Joan Laporta, presidente del FC Barcelona, ha mantenido una reunión de urgencia con Dani Olmo y Pau Víctor para comunicarles personalmente la decisión de LaLiga y la RFEF de denegar su inscripción como jugadores del club. El mandatario culé ha trasladado a los futbolistas su profundo pesar por esta situación y les ha asegurado que el club agotará todas las vías legales para revertir la decisión.

La noticia ha caído como un jarro de agua fría tanto en los jugadores como en el cuerpo técnico. Olmo y Víctor, que esperaban poder continuar su carrera en el Barcelona, se han mostrado visiblemente afectados por esta situación. Laporta, consciente de la gravedad del asunto, ha querido estar presente para ofrecerles todo su apoyo y explicarles los motivos que han llevado a esta decisión.

El presidente azulgrana ha asegurado a los jugadores que el club ha realizado todas las gestiones posibles para cumplir con los requisitos establecidos por LaLiga y que está convencido de que ha actuado correctamente. Sin embargo, ante el rechazo de su solicitud, el Barcelona no se dará por vencido y recurrirá al Consejo Superior de Deportes (CSD) o a los tribunales para intentar obtener una medida cautelar que permita a Olmo y Víctor jugar con el equipo.

Laporta ha trasladado a los jugadores su confianza en que finalmente se hará justicia y que podrán vestir la camiseta azulgrana. Además, ha querido tranquilizar a Hansi Flick, el entrenador del equipo, que también se ha mostrado preocupado por esta situación.

Debido a esta situación, Laporta no ha podido asistir a la comida de directivas en Barbastro, donde el Barcelona se enfrenta al Barbastro en partido de Copa del Rey. Sin embargo, el presidente culé sí que estará presente en el estadio para presenciar el encuentro en directo.

La negativa de LaLiga y la RFEF a inscribir a Dani Olmo y Pau Víctor supone un duro golpe para el Barcelona. El club se enfrenta ahora a un complejo proceso legal que podría prolongarse durante varias semanas. Además, esta situación genera una gran incertidumbre en el vestuario y podría afectar al rendimiento del equipo.