De La Cuna Al Infierno
·13 Maret 2025
Vistieron ambas vs. Racing

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·13 Maret 2025
El Clásico de Avellaneda está a la vuelta de la esquina, y en De la Cuna al Infierno vivimos la previa recordando y memorando a esos futbolistas que portaron ambas pieles a lo largo de la historia.
Nueva previa. Otroderby que tendrá al Club Atlético Independiente y a Racing Club disputándose la victoria en un Libertadores de América - Ricardo Enrique Bochini lleno y a explotar. En este sentido, repasamos la nómina de aquellos futbolistas que supieron vestir de rojo y blanquiceleste. Podrá parecer o resultar un tanto paradójico, sobre todo al pensar en el nombre a nombre, es cierto. Pero a los hechos nos remitimos.
Ni más ni menos que dos fieras comoNéstor Clausen y José Omar Pastoriza encabezan el registro. Ambas figuras y proezas de nuestra Institución, que aún así llevaron los colores de "La Academia" en algún momento de sus respectivas carreras.
Néstor Roldado Clausen: Un fuera de serie. Respetuoso en la vida y en la cancha. Siempre limpio para defender, jugar y hacer jugar. Aguerrido y con una buena proyección al ataque. "El Negro" debutó en el "Rojo" allá por agosto de 1980 y con un andar excelente, cortés y prolijo disputó cada pelota con una entrega envidiable durante 307 partidos, convirtiendo casi 10 goles; nueve, para ser exactos. Y aunque también tuvo su trayecto por Racing entre el ’94 y el ’95 -sin goles ni asistencias-, volvió al "Rey de Copas" en 1996, casi sobre el cierre de su carrera (futbolística) profesional. Con Independiente ganó la Libertadores del ’83, la Intercontinental del ’84 y los Torneos Locales del ’83 y el ’89. Para variar, integró el Plantel Campeón del Mundo de la Selección en 1986. En definitiva, forjó una década sagrada.
José Omar Pastoriza: Otro incomparable. Le decían"El Pato". Jugó en ambos elencos del barrio de Avellaneda, y lo hizo con clase. En el Orgullo Nacional disputó 213 cotejo, de los cuales gritó gol en 43 oportunidades. Aunque, claro, el hincha no solo lo recuerda por eso, por ser un volante ofensivo y armador extraordinario. Sino además por esa capacidad innata para llevar a Independiente a la gloria. Campeón como jugador en el Nacional 1967 y en los Metro ’70 y ’71 y determinante en la obtención de la Libertadores del ’72. En el banco, dirigió y consagró al Club en la Libertadores de 1983 y en la del Mundo en Japón del año siguiente. Hoy, desde el cielo, acompaña al "Rojo" de Avellaneda.