IAM Noticias
·10 novembre 2024
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River Plate venció a Barracas Central 3-0, en el estadio Monumental, por la vigesimosegunda fecha del Torneo 2024 de la Liga Profesional. El Millonario, que dominó durante todo el partido, logró su objetivo a partir del desnivel marcado con tres cambios decisivos en el segundo tiempo y ahora quedó a seis puntos de los líderes Vélez Sarsfield -que mañana visitará a Deportivo Riestra con la chance de volver a distanciarse- y Huracán.
Dominio, distribución, rapidez, determinación y movilidad le dieron a River Plate el control absoluto desde el inicio. Pablo Solari desequilibraba por afuera y Facundo Colidio inquietaba en el área. Desde atrás venía el apoyo: subidas de Fabricio Bustos y Maximiliano por derecha y de Milton Casco por izquierda. Y un gran trabajo en contención y distribución de Rodrigo Villagra.
Barracas Central quedó arrinconado contra su zona defensiva y con una línea de cinco intentaba contener el empuje del local. Y tuvo una gran figura: Marcelo Miño. El arquero, de 27 años, surgido en Rosario Central y con paso por Ferro Carril Oeste, reapareció, tras una lesión y cinco partidos en el banco, y en el primer tiempo se lució.
Temprano arrancó Miño a vestirse de figura: a los 7 minutos, estiró su brazo izquierdo, a puro reflejo, para desviar un tiro de Colidio. Después siguió volando y utilizando sus manos con eficiencia, sobre todo en un nuevo intento de Colidio y ante un remate de Solari que continuó con Claudio Echeverri llegando sólo por el segundo palo y desperdiciando una gran ocasión.
Barracas Central, que sigue último en la tabla, en las 22 fechas disputadas hasta hoy apenas logró 3 triunfos y es el equipo, lejos, con menor cantidad de goles a favor en el torneo (10), tuvo su solitaria situación favorable con un disparo de Iván Tapia que Franco Armani, en su única intervención en el primer tiempo, sacó arriba por el segundo palo.
El segundo tiempo arrancó con idéntica propensión. River presionando alto y atacando y Barracas aguantando. Y con la lluvia cayendo con mayor intensidad, pero sin mojar el entusiasmo de los jugadores e hinchas locales, que volvieron a llenar el Monumental. Hasta que Marcelo Gallardo se dio vuelta, miró al banco y ordenó tres ingresos.
Franco Mastantuono, Gonzalo Pity Martínez y Miguel Borja, adentro. Y los tres fueron claves para revitalizar y darle tonicidad y musculatura al dominio, sin gol hasta ahí, de River. Apenas con unos segundo en cancha, Pity Martínez, en el sector izquierdo del área, le pegó de zurda para que Miño tuviese otra buen respuesta y al recibir el rebote le dio de derecha y el tiro salió cerca. Fue un aviso.
La explosión aconteció a los 22 minutos. Borja, en el área, tocó atrás para Mastantuono, autor del centro perfecto, desde el vértice derecho del área grande, para el salto perfilado y cabezazo goleador de Maximiliano Meza.
Con otra participación fundamental de Mastantuono, River estiró la cifra, a los 30 minutos. El juvenil, que había iniciado la jugada, recuperó una pelota y dejó atrás a Javier Ruiz y disparó el zurdazo que Miño tapó. El rebote le quedó justo a Miguel Borja y el Colibrí ratificó su oficio y oportunismo goleador con un cabezazo breve.
El delantero colombiano volvió a anotar, con un cabezazo, tras un centro de, obviamente, el encendidísimo Mastantuono, que había recibido un exquisito pase de Gonzalo Martínez, en otra eficaz asociación de los tres ingresados, pero fue anulado por posición adelantada.
De todos ese tercer festejo llegaría, a los 41 minutos, con un fuerte remate desde afuera de Paulo Díaz y con una floja respuesta -la única de toda la tarde- de Marcelo Miño.
River Plate, luego de la eliminación en la semifinal de la Copa Libertadores ante Atletico Mineiro, lleva tres victorias consecutivas en el Torneo doméstico. Y con sus 36 puntos, quiere mantener viva su esperanza.