Revista La Liga
·28 settembre 2024
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El 26 de noviembre de 2011, una simple pancarta en el Santiago Bernabéu, con un mensaje desafiante y provocador, desencadenó una transformación sísmica en el derbi madrileño, pasando de la paternidad a la rivalidad.
El histórico letrero «Se busca rival digno para derbi decente, razón aquí», lanzado por la afición del Real Madrid, no solo era una provocación, sino una declaración de intenciones y un deseo de recuperar la emoción perdida en uno de los clásicos más emocionantes del mundo, que se había convertido en una monótona superioridad blanca.
Desde aquel día, el derbi madrileño ha dejado de ser una mera formalidad para convertirse en una batalla épica, donde cada encuentro se vive con una intensidad que traspasa las fronteras del fútbol. Los números, fríos y objetivos, no mienten. Antes de aquella pancarta, el Atlético de Madrid parecía un rival condenado a la eterna segunda posición, con un balance de victorias claramente desfavorable.
Los 46 partidos anteriores a la aparición de la desafiante pancarta, marcaban solo 3 victorias para Atlético Madrid, 12 empates y la apabullante cantidad de 31 victorias para el cuadro merengue.
Sin embargo, en los 46 enfrentamientos posteriores, la paridad ha sido la tónica dominante. El Real Madrid sigue manteniendo una ligera ventaja, pero las 13 victorias colchoneras y los 15 empates demuestran que la balanza se ha equilibrado de manera notable.
Este domingo, el Wanda Metropolitano volverá a ser el escenario de una nueva batalla. El Real Madrid, con la llegada de Kylian Mbappé, y el Atlético de Madrid, con el fichaje de Julián Álvarez, llegan al encuentro en un momento dulce de la temporada. Ubicados en la segunda y tercera posición de la tabla, invictos y con sus nuevas incorporaciones mostrando un gran nivel.
La pancarta de 2011 fue un punto de inflexión, un antes y un después en la historia del derbi madrileño. Aquel mensaje desafiante logró lo que parecía imposible: despertar al gigante dormido y convertir al Atlético de Madrid en un rival a la altura del Real Madrid.
La llegada de Diego Simeone tiene mucho que ver, desde entonces el Atlético ha logrado ganar dos Ligas, una Copa del Rey y una Supercopa de España, plantándole cara al que para muchos es el mejor club del mundo.
Pero también ha sufrido y tal vez las dos derrotas más dolorosas de su historia, como son las dos finales de Champions League, aun más la derrota sufrida en la final de Milán 2016, cuando el título se le escapó en el fatídico minuto 93.
Competirle al Madrid nunca será fácil, sin embargo, desde la llegada del Cholo Simeone y la pancarta del 2011, la dinámica ha cambiado, y ambos equipos se enfrentan en igualdad de condiciones, en una lucha constante por la supremacía de la capital española.
En definitiva, el derbi madrileño es mucho más que un simple partido de fútbol. Es un duelo de pasiones, de orgullo y de identidad. Es la representación máxima de la rivalidad deportiva y un ejemplo de cómo un simple gesto puede cambiar el rumbo de la historia.