Madrid-Barcelona.com
·18 dicembre 2025
El nuevo socio de Aurélien Tchouaméni llegará desde Francia por 15 millones

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El Real Madrid sigue analizando cómo reforzar su centro del campo de cara a los próximos meses. Con Tchouaméni como pieza fija y Camavinga afectado por continuas lesiones, Xabi Alonso ha tenido que buscar alternativas. El técnico entiende que el equipo necesita nuevas energías en la medular para mantener el equilibrio y la continuidad en su juego.
La lesión recurrente de Camavinga ha alterado los planes del cuerpo técnico. El francés era el complemento ideal de Tchouaméni, capaz de aportar despliegue, agresividad y llegada. Sin él, el Real Madrid ha perdido solidez y Xabi Alonso ha tenido que improvisar con otros perfiles.
Desde el club se considera que el centro del campo necesita un refuerzo que permita recuperar el orden tanto en defensa como en ataque. No se busca un jugador mediático, sino alguien funcional, con físico, disciplina táctica y margen de crecimiento. Ese análisis ha llevado a los despachos de Valdebebas a fijarse en la Ligue 1.
La lesión de Camavinga afecta al Madrid | Getty Images
Uno de los nombres que ha aparecido con fuerza es el de Mamadou Sangaré, centrocampista de 23 años que milita en el Lens. Internacional con Mali, Sangaré se ha consolidado como un jugador importante en su equipo y ha despertado el interés de varios grandes europeos.
Los informes que maneja el Real Madrid son positivos. Sangaré destaca por su potencia física, su capacidad para sostener el centro del campo y su fiabilidad en tareas defensivas. Aunque sus cifras ofensivas no llaman especialmente la atención, su perfil encaja con lo que busca el club en este momento.
Esta temporada ha disputado 15 partidos, con un gol y una asistencia. Sin embargo, su aportación va más allá de los números. Es un jugador constante, ordenado y con buena lectura del juego, cualidades muy valoradas por Xabi Alonso.
El técnico ha trasladado al club la necesidad de incorporar sangre nueva en el centro del campo. Cree que el equipo necesita un jugador que acompañe a Tchouaméni y repita el rol que Camavinga brilló en San Mamés.
Sangaré podría cumplir esa función. No hay actualmente en la plantilla otro jugador de ese perfil, y eso limita las opciones tácticas del entrenador. Frente a otras alternativas más caras, el centrocampista del Lens aparece como una opción realista, con un coste aproximado de 15 millones de euros.
El Real Madrid seguirá de cerca a Sangaré durante la Copa de África, donde jugará con la selección de Mali. El club considera que este torneo será una buena oportunidad para comprobar su rendimiento en un contexto de máxima exigencia.
Si el futbolista responde, su fichaje podría acelerarse. De llegar, sería el segundo jugador maliense en la historia del club tras Mahamadou Diarra. Por ahora, es un nombre más en la lista, pero cada vez gana más peso en la planificación del Real Madrid.









































