Fede Valverde, como capitán, ya ha sido informado, se van los 3: 'Nos vamos en enero' | OneFootball

Fede Valverde se ha convertido en el corazón del Real Madrid, no solo corre, presiona y equilibra el juego: también guía, anima y mantiene unido al vestuario. Su liderazgo natural le ha permitido asumir el rol de capitán sin generar dudas. Es el jugador que nunca se esconde, que aparece donde hace falta y que cumple allí donde Xabi Alonso lo coloca.

El técnico valora enormemente su polivalencia, puede actuar como mediocentro, como interior o incluso ocupar la banda y trabajar como un lateral de garantías. Esa flexibilidad convierte a Valverde en una pieza que encaja en cualquier idea de juego y en cualquier plan que tenga el equipo. Para Xabi Alonso es indispensable, sin embargo, no todo el mundo en el vestuario siente la misma estabilidad.

Valverde, clave en el Madrid | Getty Images

Un estilo que no convence a todos los futbolistas

Con Xabi Alonso llega una idea clara: orden, presión y una estructura muy definida. La idea es moderna, clara y exigente, pero esa exigencia no está beneficiando a todos. Hay tres jugadores que no terminan de adaptarse o de encontrar el protagonismo que buscan.

Fede Valverde ya ha sido informado de esta incomodidad, porque como capitán necesita conocer el estado del grupo. El mensaje es directo: Rodrygo, Endrick y Mendy están valorando marcharse en enero si la situación no da un giro. El malestar no es una crítica abierta al entrenador, pero sí una llamada de atención sobre la falta de minutos, confianza o encaje.

Rodrygo, Endrick y Mendy: tres casos, un mismo sentimiento

Cada jugador vive un proceso distinto, pero todos comparten la misma sensación: el Madrid actual no les da el espacio que necesitan.

Rodrygo siente que su rol se ha reducido. En temporadas pasadas fue decisivo, pero ahora las rotaciones y los nuevos planteamientos lo han dejado sin continuidad. No quiere quedarse en un segundo plano, y su entorno empieza a presionar para buscar un cambio de escenario.

Endrick, por su parte, llegó para crecer, pero el crecimiento necesita minutos, y esos minutos no han llegado. Xabi Alonso prefiere confiar en jugadores más experimentados, lo que deja al joven brasileño esperando una oportunidad que no aparece. Su progresión se está frenando, y eso preocupa.

Mendy, recién recuperado de una lesión, tampoco encuentra su sitio. El estilo ofensivo que pide el entrenador a los laterales no encaja del todo con sus características. Vuelve, quiere competir, pero nota que no está en el centro de los planes del técnico.