Major League Soccer
·7 dicembre 2025
La argentinidad al palo: Lionel Messi da a Inter Miami la MLS Cup

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·7 dicembre 2025

Leo Messi y 'Las Garzas' tocaron la cumbre del fútbol estadounidense de la manera más emocionante que podíamos pedir, al ganar la MLS Cup 2025, el tope más soñado del proyecto más impactante de la liga.
La final por la MLS Cup 2025, en la que Miami superó a Vancouver, fue una muestra de 'la argentinidad al palo', una gran intervención de Messi, De Paul, Allende y Mateo Silvetti. Fue un auténtico homenaje a la obra de la banda Bersuit Vergarabat.
La picardía, la emoción, la euforia, la gloria. Todo junto en una final que fue testigo del instinto de los argentinos campeones del mundo en Qatar 2022. Inter Miami coronó una temporada histórica con la firma del astro argentino, acompañado por su hermano de batalla, Rodrigo De Paul, y el alma albiceleste a la que se suma Tadeo Allende. Juntos transformaron en rosa la final ante Vancouver Whitecaps – el equipo que dominó todo el segundo tiempo–, para lograr una victoria 3-1 que tiene muchísimo valor emotivo y –¿por qué, no?–, revancha.
Todos los goles fueron argentinos, toda la vibra también. Es la coronación más grande de esta era ganadora de Inter Miami, escrita en rosa pero vivida en celeste y blanco, con el capitán Messi, el protagonista absoluto.
El aura de Messi, el aura que se desplega gracias a él en la historia de Inter Miami, y en la historia del fútbol. No hay nada más emotivo.
Por encima del autogol que abrió el marcador, el 1-0 de Édier Ocampo, el #10 se adueñó de la final en detalles. Todo empezó con una gambeta instantánea que provocó la jugada del gol.
Una chispa de barrio, de campeón del mundo, que anticipó lo que vendría: dos secuencias muy parecidas para cerrar el partido. La final se quebró en un solo gesto al 71': su recuperación con picardía para abrir el camino, darle ventaja al marcador y cerrarlo ante un rival que le dejó una herida en las eliminatorias de Copa de Campeones Concacaf 2025.
La tarde del sábado entre épica y barrio, Messi ganó el título 48 en su carrera, ya definitivamente tocando una vez más la gloria en un equipo diferente de su carrera.
Messi terminó los playoffs con 15 contribuciones de gol:
Además, participó en los tres goles de Inter Miami para completar una cifra nunca antes vista entre temporada regular y playoffs:
63 contribuciones de gol con 38 años.

Los tres goles de Inter Miami fueron argentinos, y el destino subrayó lo que ya era evidente en postemporada e incluso en los últimos años del fútbol mundial: la conexión Messi–De Paul sigue siendo una de las fuerzas más influyentes.

El estadio explotó luego de que De Paul le quitó ventaja a los Caps en el marcador, y al recibir entre líneas del #10. Una dúo que justo después del sorteo para la Copa del Mundo 2026, se juntaron como una vez lo hicieron en Qatar 2022, cuando levantaron el trofeo de selecciones más importante de este deporte. Fue el golpe emocional que devolvió a Miami al partido y reactivó el alma del equipo.
Después, con el tanto que cerró la final en los minutos finales, Tadeo Allende fue parte de la misma misión, de mantener la sangre albiceleste en la gran consagración de Inter Miami, un final de partido que desató lágrimas, temblores y abrazos eternos.

El tanto que cerró la final —en los minutos más pesados de un partido histórico— lo firmó Tadeo Allende, completando la misión de mantener la sangre albiceleste en la consagración más grande de Inter Miami.
Allende, rompió el récord de goles del club y de la liga en postemporada, siendo de los jugadores más importantes en la postemporada rosa.
Todo esto bajo el eje de Lionel Messi, el experto en momentos decisivos. Tres argentinos sosteniendo una historia que ya pertenece a la MLS Cup.
Javier Mascherano vivió la final como un hombre que había esperado toda una vida para ese abrazo con la historia, y en su primera experiencia de clubes.
Su voz quebrada, su celebración tras el partido confirmó que este título no era un trofeo más, sino la validación de un trabajo que nació en la duda y terminó en la gloria.
“Era uno de los objetivos cuando llegamos acá. Pudimos conseguir la Leagues Cup apenas llegamos, este año hicimos un gran año en todas las competiciones que nos tocó jugar. Llegamos a una final de Leagues Cup nuevamente, jugamos una semifinal de la Concachampions. El año pasado salimos primeros en el campeonato, lamentablemente quedamos fuera de la Primera Ronda. Este año era uno de los objetivos, poder ganar la MLS. El equipo hizo un esfuerzo muy grande, fue un año muy largo con muchísimos partidos y estuvo a la altura durante todo el año”.
¿Cómo lo hizo?
Su abrazo con Jordi Alba tras el tercer gol fue uno de los momentos más emotivos de la noche, que significa el final de carrera de su ex compañero en FC Barcelona: “su carrera no merecía otra manera que irse campeón", dijo sobre él, mientras toda Miami lo despedía como se despide a los tocados por una varita divina.
Mascherano no solo ganó: se consolidó. Este título le ofrece algo más profundo que un trofeo: la certeza de que su proyecto tiene cimientos. Y, para Miami, un mensaje claro: Masche tiene razones de sobra para quedarse.

Inter Miami no ganó solo una final y levantó el título: alcanzó el punto más alto de un proyecto que nació para revolucionar,.
Los hitos lo explican:
La MLS Cup es el fruto de una visión que nació para ser grande, pero que se hizo realmente grande con la llegada de Leo Messi, y todo lo que vino después, —el salto competitivo, la llegada de nuevas estrellas, la consolidación de un vestuario que cree y compite, la explosión cultural del club—, transformó una idea en una realidad monumental.
Jorge Mas lo resumió con el corazón en la mano: "Qué tarde, qué temporada, sueños que se hacen realidad. Esfuerzo tremendo del equipo. Mérito para Vancouver, pero hacerlo en casa, levantar la MLS Cup, tener una estrella sobre nuestro escudo para siempre… es simplemente una sensación increíble. Es una sensación increíble".
Y sobre el camino:
“Fue difícil. Vale cada esfuerzo. Soñamos con construir un gran equipo, traer a los mejores jugadores del mundo. Hoy nos despedimos de dos jugadores generacionales… y vamos a defender el título en 2026.”
El equipo más impactante de la MLS alcanzó el punto más alto de la liga, completando un camino que combinó obsesión, inversión, identidad sudamericana y una narrativa global que solo Messi podía activar.
David Beckham, por su parte, vivió la final como si aún tuviera los botines en el vestuario, con todas las emociones a flote, dijo: "En los últimos minutos del partido, solo esperas que podamos aguantar. Todo el crédito para Vancouver. Jugaron un gran partido. Nos pusieron bajo mucha presión, y cuando marcaron ese gol, estuvieron encima de nosotros un poco, pero creo que se notó el cambio. Empezamos a controlar un poco más el balón en el mediocampo".
No se olvidó del #10: "Cuando le das el balón a Leo, él crea ocasiones, ya sea anotándolas o generándolas. Pero el equipo se mantuvo unido, y así lo han hecho todo el año".
Pero lo más importante para él, que alguna vez también impactó la liga a su manera, fue creer "Hubo muchas noches de insomnio. Pero siempre creí en Miami… siempre prometimos traer éxito y los mejores jugadores. Hoy lo logramos. El próximo año seguimos, pero esta noche vamos a celebrar”
Estos dos socios fundadores de IMCF dejaron claro que esta MLS Cup es la consecuencia natural de un proyecto que decidió buscar la gloria… y terminó viviendo en ella.
La imagen final lo explica todo:
Messi abrazando a sus hijos, De Paul celebrando su primer título de clubes, Mascherano llorando en la línea, Jordi y Busquets despidiéndose como campeones.
Inter Miami ganó con picardía, corazón, hablando muy argentino y escribiendo la página más épica y gloriosa de su corta historia.
Y si esta fue la final que definió una era… lo que viene promete ser todavía más grande.

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