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·2 novembre 2024
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Consagrado como una de las máximas figuras del FC Barcelona de Hansi Flick, Raphinha está viviendo su mejor momento como culé. En la previa del derbi ante el Espanyol, el brasileño concedió una entrevista a 'El País' en la que, además de valorar su gran presente, recordó sus duros comienzos, además de dejar sus sensaciones antes del duelo ante los periquitos y confesarse sobre los episodios racistas de los que fue víctima en el Clásico del Bernabéu.
"En los derbis, después de todo lo vivido, le puedo asegurar que no importa si un equipo está peleando por el descenso y el otro por la liga. En Inglaterra, por ejemplo, el Leeds contra el United es como un derbi histórico. Y le dimos mucho trabajo. Tuvieron que correr mucho más de lo que esperaban", comenzó diciendo sobre la emoción que se vive en los choques entre rivales citadinos.
"Los de la calle, esos sí que son picantes. Cuando eres pequeño y vives en una favela te acostumbras a ver pasar gente con pistolas. Y hay aficionados que van a los partidos con armas. Intentan ponerte miedo para que su equipo gane. Una vez, de niños, estábamos en el vestuario y empezaron a golpearnos la puerta. 'Si ganan, no salen de aquí', nos gritaban", agregó sobre aquellos derbis tuvo que jugar en Brasil.
Una anécdota que le llevó a recordar sus difíciles comienzos en sudamérica, donde incluso llegó a pedir comida en la calle. "Tenía cerca de 12 años. Estaba con un amigo, todos sucios después de haber terminado un entrenamiento. No había duchas en el club. Y el bus tardaba mucho en llegar. Teníamos hambre, pero no teníamos dinero. Entonces, comenzamos a pedir en la calle para comer algo", comentó.
"Fue un poco complicado, la gente no quiere que la molestes. Personas de buen corazón nos ayudaron. Pero entiendo a la gente que no nos dio nada. Es complicado que te paren, parecíamos como chicos que vivíamos en la calle. Es normal que se asustaran un poco", afirmó, agregando que "es importante no olvidarse de todo lo que pasamos. Recordar te convierte en una mejor persona".
Una situación que contrasta con su gran presente en el Barça, aunque el propio jugador ha admitido que ha pasado momentos difíciles en el club debido a la presión que genera el escudo. "Cuando juegas en un club tan grande como el Barcelona, las críticas son normales. Aquí la exigencia está en el nivel más alto. Yo necesité un tiempo de adaptación", manifestó.
Un problema que ha sabido revertir, y mucho tiene que ver la confianza que ha logrado conseguir a las órdenes de Hansi Flick. "La confianza no solo es importante en el fútbol, también lo es en la vida. Si en tu trabajo no tienes confianza para hacer lo mejor, es difícil que te salgan las cosas. Y, cuando no la tienes, muchas veces te olvidas hasta de lo que sabes hacer", sostuvo.
Raphinha, pese a ser una de las grandes figuras del equipo, no se considera protagonista. "No me siento protagonista. Sí sé que estoy haciendo una buena temporada, pero el protagonismo es de todo el equipo. Si marcamos 10 goles, pero encajamos 10, el partido termina empatado. Cuando todos están bien, es natural que los delanteros sobresalgan más, son los que marcan goles. En mi opinión, todos son protagonistas", comentó.
Además, confesó que se vio fuera del club en un par de oportunidades, pero Deco le pidió paciencia y terminó recogiendo sus frutos. "En algunos momentos, sí (se vio fuera). Sobre todo, durante los primeros seis meses, los de antes del mundial. Pero también lo he sentido en el resto de las ventanas. Siempre se decía una cosa u otra, que si no servía, que si había que venderme", manifestó.
Al ser cuestionado sobre si considera que Lamine Yamal está siguiendo los pasos de Lionel Messi en la Ciudad Condal, el portoalegrense confesó que le ve más parecido a Neymar Jr. que al argentino.
"Lo veo más parecido a Neymar. Los regates, lo rápido que piensa para regatear. Cuando piensas que le puedes robar el balón te hace algo que nunca has visto en tu vida"
Por otro lado, al ser preguntado sobre por qué no detuvo el Clásico después de los insultos racistas de un sector de la grada, Raphinha afirmó que "ya lo hemos hablado, cada persona es diferente. Claro que te molesta, estamos haciendo nuestro trabajo. Sabemos que la afición del otro equipo puede intentar hacer de todo para que la cosas no te salgan bien y que nosotros debemos estar concentrados, pero cuando te insultan y esos insultos los llevan hacia otro lado, es más complicado".
"Lo que podemos hacer después de los partidos, lo hacemos después. Durante, tenemos que estar centrados. Hay mucha gente que normaliza que se vaya a los estadios a insultar. Eso no puede ser normalizado. Alguien con más poder debe hacer algo"
Finalmente, afirmó entender las acciones de Vinicius Jr. respecto a este tema. "Nosotros no sabemos lo que pasó en su infancia. No sabemos las cosas que ha escuchado cuando era pequeño. Estas cosas llevan a las personas a su límite y a él le molesta mucho. Vinicius es un chico muy sonriente, siempre está haciendo bromas. El único tema que le molesta mucho es este, entiendo su cabreo", concluyó.