Ancelotti arranca su etapa con Brasil con dudas y sin goles | OneFootball

La nueva etapa del italiano con la ‘Canarinha’, tras su paso por el Real Madrid, arranca con dudas tras un empate sin goles en Guayaquil

El debut de Ancelotti al frente de la selección brasileña terminó con un sabor amargo. Brasil no pasó del empate (0-0) frente a Ecuador en un encuentro dominado por la Tri, que puso contra las cuerdas a una pentacampeona muy lejos del nivel que se espera. Solo Vinicius, jugador del Real Madrid, ofreció algo de desequilibrio en un equipo apagado, con escasa creación y sin rastro del clásico ‘jogo bonito’.

La primera aparición oficial de Carlo Ancelotti como seleccionador de Brasil deja más dudas que certezas. En un partido exigente ante Ecuador, correspondiente a las eliminatorias para el Mundial 2026, la ‘Canarinha’ mostró una versión plana y temerosa, muy alejada de lo que se espera de una selección cinco veces campeona del mundo.

Ancelotti tiene trabajo por delante

Brasil planteó un 4-3-3 con Casemiro, Gerson y Bruno Guimarães en la medular, pero fue Ecuador quien dominó con claridad el ritmo del juego. Moisés Caicedo firmó una actuación colosal que anuló por completo la propuesta brasileña. Ancelotti, desde el banquillo, fue incapaz de revertir la dinámica con cambios que apenas modificaron la inercia negativa del equipo.

Vinicius, como viene siendo habitual en el Real Madrid, fue el único que generó algo de peligro. En la segunda parte firmó dos acciones destacadas: primero desbordó a Ordóñez para asistir a Richarlison, que no supo definir, y después dejó un balón franco a Casemiro, cuyo disparo fue demasiado tímido. Más allá del extremo madridista, la selección apenas inquietó al portero local.

El empate deja a Brasil en zona de clasificación, pero evidencia el enorme reto que tiene por delante Ancelotti. Pese a su historial como técnico de élite, devolverle a Brasil el aura competitiva será una tarea mucho más compleja de lo que muchos anticipaban. Este equipo necesita una reconstrucción profunda, y el tiempo para transformar dudas en certezas es limitado.