Crónica | Sevilla 0-2 Real Betis: Pellegrini rompe con la maldición del Pizjuán | OneFootball

La jornada 14 del campeonato nacional de liga presentaba un inmejorable encuentro, entre el Sevilla FC y el Real Betis Balompié, el Gran Derbi sevillano.

Ambos conjuntos llegaban con bajas sensibles entre las que destacaban del equipo verdiblanco: Isco, Amrabat, Lo Celso y Antony por sanción. Por parte del conjunto de Matias Almeyda no pudo contar con Vargas, Januzaj y Suazo como principales ausencias.

El partido comenzaba muy bronco, entradas a destiempo sin posibilidad de jugar el balón y con varias faltas cometidas que no permitían la fluidez del juego por parte de los dos equipos.

El protagonista del esférico era muy alterno, no había un claro dominador de la posesión, donde se jugaba gran parte de la primera media hora de juego en el centro del campo. La presión e intensidad de los dos conjuntos, era la tónica dominante con balones en largo e imprecisiones que daba a lugar a que una genialidad o detalle extra, inclinaría la balanza hacia un lado u otro.

Esa falta de continuidad del juego se reflejaba en ocasiones muy contadas. Hasta el minuto 31 no hubo una ocasión real de peligro, liderada por Ejuke desde el costado diestro que le dejó un balón al borde del área a Sow que con un potente golpeo se fue por encima de la porteria de Alvaro Valles.

Para contar la primera gran ocasion del conjunto bético, nos remontamos al minuto 36 dónde una galopada de Abde por la parte izquierda se internaba en el área y el golpeo demasiado centrado lo desvíaba Odysseas Vlachodimos.

Marc Bartra recibía la primera cartulina del partido en el minuto 41, tras cortar un contragolpe del conjunto nervionense protagonizada por Carmona.

Finalizaba la primera parte tal y como empezó, empate a cero que explicaba como había sido el duelo en los primeros 45 minutos, muy igualado con posesiones poco clarividentes y sin un dueño claro del partido.

Se iniciaba la segunda mitad con un perfil muy similar a la primera, Aitor Ruibal acumulaba una amarilla más al plantel verdiblanco, tras una patada en la que Peque se anticipaba a la disputa del balón.

Llegaba el primer gol del partido en clave verdiblanca, una mala salida de balón de Mendy propiciaba que Pablo Fornals, el autor del gol, le robase el balón en las inmediaciones del área y tras una jugada que él solo se fabricó, elaboró y culminó con un golpeo que terminó en el fondo de las mallas.

Se ponía por delante el conjunto de Manuel Pellegrini y el Betis daba síntomas de que quería más, no se contentaba con el tanto de Fornals y proponía jugadas de mayor calidad y sin titubeos.

Se cumplía la hora de partido y un centro de Isaac Romero desde la parte diestra encontraba a un Akor Adams dentro del área y remataba en posición antirreglamentaria, que atajaba de una forma excelsa Álvaro Valles.

El Betis seguía intentándolo de múltiples formas y fue a raíz de un saque de esquina lanzado por Pablo Fornals, donde el Betis conseguía el segundo tanto del partido a través de un disparo de Sergi Altimira dentro del área donde nada pudo hacer el meta rojiblanco.

El Betis necesitaba piernas frescas y Manuel Pellegrini dio entrada a ángel Ortiz por Pablo García en el 72.

En el minuto 80 se producía, tras el festejo de Natan en una acción defensiva sublime, varios lanzamientos de botellas de la afición sevillista sobre del área bética, provocando la suspensión del partido de forma momentánea durante 15 minutos activando el protocolo de seguridad.

El Sevilla se quedaba con un jugador menos tras una entrada totalmente a destiempo de Isaac Romero sobre Valentín Gómez en el 84.

Venían múltiples cambios por parte de Manuel Pellegrini dando entrada a Ricardo Rodríguez Chimy Ávila y Riquelme por Pablo Fornals Cucho y Aitor Ruibal.

El cuarto árbitro anunciaba 6 minutos de tiempo añadido en los que el equipo de Matías Almeyda no dió síntomas de remontada.

El Betis se llevaba los 3 puntos de Nervión con un partido muy serio, fiable y convenciendo a la parroquia de Heliópolis.

Pellegrin, que parece haber dado con la clave, rompió finalmente con la maldición del Pizjuán.