E. Dominguez, el DT campeón con Colón, volvió a CONSAGRARSE | OneFootball

Eduardo Domínguez volvió a hacer historia, nuevamente campeón y el nombre que se repite, que explica el proceso y que sostiene el resultado es el de él. El Barba levantó otra copa y alcanzó su quinto título con el Pincha, siendo uno de los técnicos más ganadores del fútbol argentino.

Estudiantes se metió por la ventana, clasificó octavo, y terminó en lo más alto. Domínguez entendió el contexto como pocos, supo que el equipo tenía que hacerse fuerte cuando el escenario era adverso. El pasillo de espaldas a Central marcó un punto de quiebre, llegaron las sanciones, el castigo al club, Verón obligado a mirar desde la tribuna y una relación tensa con la AFA. Pero también llegó algo más fuerte: el respaldo silencioso del hincha del fútbol, el que reconoce a los equipos que juegan en serio y a los técnicos que no improvisan.

De ahí Eliminó a Central Córdoba en cuartos, le ganó a Gimnasia en semis y cuando la final parecía perdida frente a Racing, lo empató agónicamente, lo aguanto y lo ganó con mística. Y hoy en San Nicolás, este equipo con el ADN Dominguez, lo volvió a hacer, con carácter, orden y convicción es campeón otra vez, el segundo título en una semana.

Eduardo Domínguez ya sabe lo que es salir campeón con Estudiantes, ganó la Copa Argentina 2023, la Copa de la Liga 2024, el Trofeo de Campeones 2024, el Torneo Clausura 2025 y ahora nuevamente el Trofeo de Campeones. Así, se alejó de nombres ilustres como Sabella, Bilardo y Simeone, y quedó a solo uno de Osvaldo Zubeldía, el máximo ganador en el banco de Estudiantes.

Más allá de las copas, está la identidad. Este Estudiantes es el reflejo de su técnico: serio, competitivo, resiliente. Un equipo que cuando todo es cuesta abajo, responde. Que cuando todos lo daban por muerto, se hizo mas grande. Que no lo apretó el contexto.

Eduardo Domínguez lo demostró en Colón en 2021, cuando también le ganó una final a Racing. Hoy lo ratifica una vez más en Estudiantes, un club que valora el proceso, el proyecto y el trabajo sostenido. El Barba entendió esa escuela y la potenció. Después de cerrar el año de esta manera, y sin saber si sigue un año mas, Domínguez se ganó un lugar grande en la historia del club y en el corazón del hincha pincharrata. Porque Estudiantes es grande, y porque su técnico también lo es.