El United de Rúben Amorim aún no logra ganar 2 partidos seguidos | OneFootball

El Manchester United sigue sin levantar cabeza. A pesar de un nuevo proyecto y la llegada del prometedor técnico portugués Rúben Amorim, la inestabilidad y las dudas no se han disipado. La estadística que pone en evidencia el lento arranque del técnico ex-Sporting de Lisboa es contundente 29 partidos y aún no ha logrado ganar dos jornadas consecutivas de Premier League.

Comparaciones que duelen en Old Trafford, para la directiva y la afición ‘red devil’, la realidad es preocupante cuando se compara con otros entrenadores del denominado Big 6:

Arne Slot (Liverpool): Necesitó solo 2 partidos para encadenar dos triunfos.

Pep Guardiola (Manchester City): También lo logró en 2 partidos.

Thomas Frank (Chelsea): Completó su doble victoria en su segundo encuentro.

Enzo Maresca (Tottenham): Tardó 5 partidos.

Mikel Arteta (Arsenal): Lo consiguió tras 9 partidos.

En cambio, Amorim ya acumula 29 encuentros en el banquillo del United y todavía no ha logrado una racha de dos victorias consecutivas en liga, una cifra que genera frustración incluso entre los más pacientes. Sus estadsitcas no ayudan y hacen recordar que hace poco el entenador clasifico a sus jugadores como «El peor plantel de la historia» pero si miramos las estadísticas de Amorim bajo el mando del United podemos cuestionar esto, quizas sus jugadores no hacen el trabajo bien porque el es gran parte del problema.

Desde la salida de Sir Alex Ferguson, el club ha pasado por más de media docena de entrenadores, incluyendo nombres de peso como Mourinho, Van Gaal, Solskjær o Ten Hag, sin que ninguno haya podido devolver al equipo a la élite europea. La apuesta por Amorim fue entendida como un giro hacia un proyecto de juego moderno y sostenido, pero los resultados aún no reflejan progreso.

El United ha mostrado flashes de buen fútbol y ha sumado victorias puntuales, pero sin continuidad. Cada paso adelante parece ir acompañado de una caída, ya sea ante rivales directos o clubes recién ascendidos.

A pesar del respaldo público de la directiva, el ambiente en Old Trafford es tenso. Las pancartas de apoyo han sido reemplazadas por murmullos de impaciencia. El equipo se encuentra actualmente fuera de puestos europeos y con un calendario complicado por delante. La incapacidad de hilvanar victorias empieza a pesar, y más aún si se consideran las inversiones millonarias realizadas en los dos últimos mercados.

Mientras otros equipos como Arsenal, City o incluso Chelsea ya muestran identidad bajo sus nuevos técnicos, el Manchester United sigue en busca de respuestas.

El próximo duelo será clave. Si no consigue al menos una victoria convincente, el récord negativo de Amorim seguirá creciendo y su proyecto, que prometía ser de largo plazo, podría tener fecha de caducidad prematura. Porque en Manchester, la paciencia tiene un límite y parece estar cerca de agotarse.