El verdao golpeó primero: River 1-2 Palmeiras | OneFootball

No hubo especulación alguna, ni tiempo de medirse. El partido inició con pelota a favor de Palmeiras que, al minuto 5 consiguió un corner, y mientras toda la defensa de River miraba, Gómez cabeceó de pique al suelo, se la pegó a un palo a Armani que nada pudo hacer, y en el amanecer del encuentro en el Estadio Monumental, el verdao se adelantó 1-0.

River, parado con línea de 3, sufrió el partido demasiado. La falsa de línea de 5 con Montiel y Acuña de carrileros no sirvió ya que no retrocedía a tiempo y dejaban huecos en las bandas. Luego, el dilema de todo el año en el millonario, el mediocampo. Enzo Perez quedó lento, Nacho Fernandez no estuvo práctico, y Castaño trataba de limpiar las imprecisiones de sus compañeros pero el futbol es contagio. Salas y Driussi casi no participaron, la pelota no les llegaba. Fue una paliza táctica de Palmeiras.

Tras pelotas que se fueron cerca o pegaron en el palo, en el 41, tras una gran jugada de Lopez, Vitor Roque dejó pagando a Paulo Díaz y luego Armani, y definió sobrio al segundo palo.

El segundo tiempo fue distinto. River se acomodó en línea de 4, tuvo más la pelota, Juanfer Quintero generó juego e hizo que Palmeiras se tire atrás. Grave error del verdao, cederle la pelota y aguantar atrás los ataques del millonario, lo condicionaron y River mereció el empate. La polémica estuvo en una grosera falta de Weverton, que ataca una pelota dividida, pero antes se lleva puesto a Montiel. El arbitro fue al VAR, cantó la falta, el estadio festejó, pero luego, Valenzuela siguió su declaración, marcando offside previo del campeón del mundo, y anulando dicha falta.

De tanto insistir, de hacer que Palmeiras no patee al arco en el segundo tiempo, de un tiro lejano con un rebote de por medio, Lucas Martinez Quarta marcó en el 89 el descuento de un River que hizo delirar al estadio, y generar nerviosismo en algunos jugadores brasileros que tiraban la pelota a cualquier parte.

Una de Borja cerca del palo, un centro de Montiel que lo tira bombeado y era raso. Una barrida digna de Van Dijk pero de Juanfer Quintero mano a mano, fue lo que sucedió en los últimos siete de adición. River lo tuvo pero no pudo, pero sigue vivo para ir a Brasil.

Está casi claro que salvo por Flamengo, pareciera que el campeón sale de este partido. Si Palmeiras juega como el primer tiempo, tiene asegurada las semifinales. Si River juega como en el segundo tiempo, puede pasar tranquilamente en Brasil.

Pareciera que River se quedó con menos de lo que mereció por el complemento que hizo, pero cabe recordar que, en el primer tiempo pudo haber sido goleado.

Mucho que trabajar, liga de por medio para ambos, pero tanto Abel Ferreira, y Marcelo Gallardo, dos leyendas de sus instituciones, coincidieron en lo mismo. "El partido está abierto", la serie sigue en pie, y Palmeiras dejó con vida a River.