La Juventus vuelve a su esencia | OneFootball

La Juventus, con la crucial y sufrida victoria ante el Leipzig en Champions League, ha recuperado el «gen» competitivo que tanto se esperaba.

Después de varios años de incertidumbre y altibajos, la Juventus ha demostrado en Leipzig que su ADN competitivo sigue intacto. No fue solo una cuestión de puntos en la Champions League, sino de carácter y estilo: un regreso a esas noches donde el equipo de Turín encontraba la manera de vencer, incluso cuando todo parecía estar en contra.

Jugadores de la Juventus haciéndose la foto previa de equipo antes de enfrentarse al Leipzig. Fuente: Maja Hitij/Getty Images.

El punto de inflexión de Leipzig

El partido que ha devuelto la esencia característica de la Vecchia Signora se vivió en la segunda jornada de la Champions League, ante un RB Leipzig que parecía tener todo a su favor. Las lesiones tempranas de Bremer y Nico González, dos pilares fundamentales en el esquema de Thiago Motta, fueron el primer revés de la noche. Los locales, sin piedad, aprovecharon su primer disparo a portería para adelantarse en el marcador. Y como si el destino estuviera en contra de los italianos, la roja de Di Gregorio complicó aún más el panorama, dejando a los bianconeri en una situación crítica.

Pero la Juventus nunca han sido un equipo que se rinda fácilmente. Vlahovic, con su instinto de goleador nato, aprovechó un balón suelto en el área para igualar el marcador y devolver la esperanza a los suyos. Por su parte, Conceição fue un verdadero motor en la banda, presionando sin descanso a los defensores alemanes y creando oportunidades de peligro constante. Fue su incansable labor la que abrió el espacio que necesitaba el club para darle la vuelta al partido, llevando en volandas el esfuerzo de los de Turín.

Este triunfo en Leipzig no fue solo una victoria en el marcador; fue un triunfo emocional, un regreso a los valores que han hecho grande al equipo italiano. Para una afición que llevaba años esperando un partido así, la noche en Alemania fue mucho más que tres puntos: fue una reivindicación del coraje y del alma que siempre ha definido al equipo piamontés durante temporadas históricas.