Diario La Escuadra
·23 de dezembro de 2024
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El Liverpool, dirigido por Arne Slot, continúa con una trayectoria impecable. El técnico holandés puede presumir de resultados y de plantilla. Mohamed Salah hizo historia ayer al convertirse en el cuarto máximo goleador del club. Además, lidera la Premier League como máximo anotador y asistente de la temporada, con 15 goles y 11 asistencias, superando a figuras como Haaland, Palmer y Saka.
Con un Manchester City pasando por una crisis inusual, pero cada vez más habitual jornada tras jornada, han alejado al equipo de Pep Guardiola de pelear por el título que han ganado de forma consecutiva estos últimos cuatro años. Se acabó el dominio citizen en Inglaterra, y por lo que parece todo apunta a que hay un claro favorito a hacerse con el trofeo.
El Liverpool está completando una temporada en la que aspiran a ganarlo todo, puesto que en todas las competiciones que disputan tienen opciones para optar al título. En Premier League, los reds ocupan la primera posición tras pasar por encima con un 3-6 al Tottenham. Esta contundente victoria les da una ventaja de cuatro puntos sobre el segundo, el Chelsea, que empató contra el Everton en Goodison Park.
Mohamed Salah del Liverpool celebrando su gol en el partido de Premier League contra el Tottenham Hotspur FC | Fuente: Alex Pantling/Getty Images
El duelo en el norte de Londres les puso líderes de la tabla de la Premier League con 39 puntos. Según las estadísticas, la mitad de las veces (en 16 de 32 temporadas) el equipo que lidera la tabla de la Premier League el día de Navidad gana el título. Esto simplemente es probabilidad, por lo que no es exacto que tenga que ocurrir. Esta es la séptima vez que el Liverpool queda primero antes del 25 de diciembre.
No obstante, este dato solo le ha garantizado ganar la Premier una vez, en la temporada 19-20, desde el cambio de categoría en 1992, año en el que también fueron campeones. Por ejemplo, en el caso del Arsenal, los gunners lideraron la tabla en Navidad por cuarta vez la temporada pasada y, como en las tres ocasiones anteriores, no lograron levantar el trofeo. Por el contrario, el Chelsea y el Manchester City (además de los ex campeones Blackburn Rovers y Leicester City) siempre han ganado el título cuando han liderado el grupo en esta etapa.
Iliman Ndiaye del Everton corriendo con el balón junto a Nicolas Jackson del Chelsea durante el partido de Premier League | Fuente: Carl Recine/Getty Images
Para el técnico del Liverpool, Arne Slot, ganar el título es una opción real. «Quedan tres partidos para el ecuador, pero somos un equipo difícil de vencer. Si fuera fácil ganar la liga, cualquier equipo lo haría», añadió el holandés en rueda de prensa después del encuentro frente al Tottenham. Los reds, aún tienen que hacer frente al boxing day, día de partido contra el Leicester City, que viene de perder frente a los Wolves, y al encuentro de antes de final de año frente al West Ham de Lopetegui.
Este Liverpool no parte de una nueva base o nuevos jugadores. En este equipo ya había una filosofía, jugadores con experiencia que lo han ganado todo y con la suficiente calidad individual para seguir haciendo historia con los reds. El equipo que dejaba Jürgen Klopp era un equipo unido, con un estilo de juego claro y que predominaba en cada partido. Solo faltaba volver a dar ese pasito que les colocara de nuevo en lo más alto.
Jurgen Klopp, ex entrenador del Liverpool, y Virgil van Dijk saludandose después del partido frente al Wolverhampton Wanderers en Anfield | Fuente: Clive Brunskill/Getty Images
La temporada pasada completaron un curso notable, finalistas y ganadores de la EFL Cup, quedaron terceros tras pelear durante muchas jornadas contra Arsenal y Manchester City la primera posición, aunque fallaron en partidos decisivos en los que no podían dejarse puntos. Además, compitieron en Europa League, pero cayeron en los cuartos de final contra el Atalanta, vigente campeón, tras dos duras derrotas. En el partido de ida en Anfield, los italianos le encajaron un 0-3, y en el de vuelta, 1-0.
Estos fueron los primeros indicios de que el Liverpool volvía a ser competitivo. La llegada de Arne Slot ha provocado que los reds encuentren su fórmula para ganar: controlar el juego y ser agresivos con el balón. Es uno de los equipos que más toca el balón y que más pases genera. Slot quiere que los jugadores del Liverpool operen más arriba en el campo, pero sin la agresividad frenética que mostraron los equipos de Klopp en el pasado. En cambio, se trata de elegir los momentos en los que pueden atacar al rival.
Arne Slot, entrenador del Liverpool, celebrando con Ibrahima Konate la victoria en la UEFA Champions League 2024/25 contra el RB Leipzig | Fuente: Maja Hitij/Getty Images
Los cambios que ha implementado Slot son los siguientes. Dio un nuevo rol para el mediocampista holandés Ryan Gravenberch. Ahora el mediocentro actúa como un “6” al establecerse en un sistema 4-2-3-1. Gravenberch aporta una serie de puntos fuertes: resistencia a la presión, conciencia del espacio a su alrededor tanto con como sin posesión y una capacidad de pase que ayuda a conectar la defensa y el ataque. Su paso al puesto de ‘número seis’ ha permitido a Slot utilizar a Alexis Mac Allister más arriba en el campo con la posesión.
Por el contrario, el que ha vuelto a su posición habitual es Alexander-Arnold. Después de saltar al mediocampo tanto para el club como para la selección la temporada pasada, Trent Alexander-Arnold ha estado jugando más como lateral derecho «tradicional» con Slot. Si bien esto le ha proporcionado una mayor estabilidad defensiva, todavía ha podido aprovechar al máximo su talento para pasar desde zonas más profundas, especialmente cuando el Liverpool intenta construir desde atrás o mover la pelota de la defensa al ataque.